Relato y dialogo hotwife y cornudo sumiso - Relatos Eróticos

Relato y dialogo hotwife y cornudo sumiso

... maquillaje manchado, el pelo revuelto, los muslos rojos. Sabe lo que significa.

💦 Limpieza del pecado

Eva (caminando hasta Toni, levantando su falda sin ropa interior): — ¿Ves esto? Seca… pero sucia por dentro. Lámeme. No digas nada. Limpia los restos de todo lo que no eres tú.

Toni se lanza. Su lengua entra suave, lenta, con devoción, recorriendo los labios y saboreando la mezcla de fluidos ajenos. Eva se apoya en su cabeza.

Eva (mientras gime suavemente): — Así… eso es lo único que mereces. Ser la lengua que recoge el placer de otros. A ti jamás se te pondrá dura por mí. Solo te queda servir… como la basura obediente que eres.

Lucía (se quita las bragas empapadas y se las lanza en la cara): — ¡Estas estaban secándose dentro de mi coño! Hueles eso, cerdo sumiso… ¿sabes cuántas veces me la metieron sin sacarla? — Límpiame también. Tengo los muslos pegajosos. Y los pezones sudados. Vamos, trapo.

Toni, entre jadeos, pasa de una a la otra. Lamiendo. Besando. Tragando. Ellas se ríen. Una le escupe en el pelo, otra le pisa la espalda con un tacón. Él no se resiste. Lo desea.

📹 Humillación con juguete y grabación

Eva (saca un consolador realista, grueso, con ventosa): — ¿Recuerdas esto, Toni? Lo usábamos contigo antes de que aceptaras lo que eres. Ahora es el símbolo de tu lugar: este trozo de goma me da más placer que tu polla entera.

Lo pega en la pared. El juguete aún tiene restos de lubricante.

Eva (mira a Lucía): — ¿Grabamos esto para nuestro ...

... grupo? Las chicas quieren ver lo bajo que ha caído nuestro cornudo.

Lucía (sacando el móvil): — Listo. Toni, arrástrate. Chúpalo como si fuera la polla de uno de los que me folló esta noche.

Toni (con la voz temblorosa): — Por favor… déjame… déjame demostrar que soy vuestro juguete… vuestra basura… dejadme saborear lo que no puedo tener…

Se arrodilla. Toma el consolador con ambas manos y empieza a lamerlo. Luego lo mete lentamente en la boca, con arcadas leves, como Eva la noche anterior.

Eva (ríe): — ¿Oyes eso, Lucía? Igualito que yo… cuando me ahogaba con esa polla gigante en el coche. ¿Te gustó imaginarme así, Toni?

Toni (con el juguete en la boca): — Mmmmmhhhhh…

Lucía (grabando de cerca): — Mírale las lágrimas… está tan humillado… y tan jodidamente feliz. Este vídeo va a dar vueltas. Todas van a saber lo que eres.

🩷 Suplica renovada

Eva lo saca del consolador y le escupe directamente en la cara. Luego se le sienta encima, de espaldas, con el culo en su pecho. Le ofrece el sudor de su espalda para que lo lama. Lucía hace lo mismo con los pies.

Eva: — Toni… ¿quieres que esto sea tu vida? ¿Verme follar con otros? ¿Limpiarme después? ¿Suplicar por sentir lo que otros dejan dentro de mí?

Toni (llorando, besando sus nalgas): — Sí… sí, Ama… por favor… quiero perteneceros… ser vuestro trapo… vivir sabiendo que nunca seré suficiente…

Lucía: — Entonces ponte de pie. Enséñanos las bragas. Gira. Repite lo que eres.

Toni obedece. Se pone de pie, con ...