Una misteriosa, insólita y sorprendente familia XI - Relatos Eróticos

Una misteriosa, insólita y sorprendente familia XI

... izquierda y unidos al paredón que circundaba y delimitaba la finca, habían construidos diez aparcamientos, más bien diez cocheras individuales y bastante amplias, que además podían cerrarse, ya que todas tenían sus respectivas persianas abatibles, y en una de ellas aparco Violeta, tras lo que procedieron a bajar todos. En ese momento apareció Ilona y tras darles dos besos a Giulia y a Andrea, esta última se la presento a los demás diciendo:

-Esta es Ilona, que desde hace unos meses también entrena con nuestro equipo de futbol, es una delantera goleadora.

Todas la saludaron dándole un par de besos en sus mejillas, mientras Julio admiraba a aquella rubia impresionante que iba vestida únicamente con unos shorts exiguos y el sujetador de un bikini, era alta, cerca de 1.80, pues más tarde se enteró que medía 1.78, sus ojos eran grises con el pelo rubio y aún más corto que Andrea, a estilo militar, y curiosamente tenía cierto parecido a su hermana mayor. En cuanto a su cuerpo nada tenía que envidiar a las siete jóvenes que le acompañaban y cuando le toco a él saludarla, ya que fue el último en hacerlo, Ilona no solo le dio los dos respectivos besos en sus mejillas, pues para dárselos se acercó a él poniéndose de puntillas, cosa innecesaria a todas luces, a la vez que se agarraba a sus musculosos brazos y le colocaba sus nada despreciables pechos en su tórax, y decía con su acento extranjero:

-Menos mal que uno de los nuevos es varón, que mujeres estamos ya demasiadas, y ...

... vaya espécimen ¿También juegas al futbol?

-Joder, ¿sus compañeras están igual de buenas que ella? – pregunto Alba a Andrea mirando fascinada a la rubia – Porque si es así a Julio lo vamos a exprimir entre todas.

-No tengo ni idea. – contesto Andrea – Solo conocemos a Ilona, pero ella podrá decirte como son sus tres compañeras.

-Yo soy la más alta, pero dese luego no soy la más guapa, Tala, Alika y Lola, son tres chicas hermosísimas. – dijo la aludida – Sobre todo Alika que es como una chocolatina apetecible, ahora os las presentare.

-Deberíamos darle un respiro a Julio. – dijo riendo Belén señalando la erección imposible de disimular de su hermano que amenazaba con romper su pantalón deportivo – Entre el viajecito estimulante que le ha dado Giulia con su culito y el achuchón mamario que le acaba de dar la nórdica, vuelve a tener al espectro desesperado por salir de su encierro.

Ante la cara de incredulidad de Ilona que miraba asombrada la enorme carpa que formaba el espectro, como lo había denominado Belén, hacía sospechar que era de unas dimensiones nada comunes, las otras rompieron a reír de forma estrepitosa consiguiendo que Ilona se pusiese roja como el carmín, mirando compungida a las demás y diciendo:

-Lo siento, de verdad lo siento, no era mi intención alterar al chico de semejante manera, pero ya me había parecido a mí que algo me empujaba hacia detrás cuando lo he abrazado, aunque parece ser que no era por rechazo.

Su comentario solo consiguió que ...