-
Nuestro comienzo en el nudismo, el sexo y los intercambios familiares
Fecha: 21/12/2025, Categorías: Incesto Sexo con Maduras Voyerismo Autor: Veronicca, Fuente: SexoSinTabues30
... vergüenza, porque la gente se quedaba mirando y tenía miedo de que pudieran decirnos algo, pero simplemente se quedaron mirando, supongo que con evidente excitación. Al segundo día en la playa, el mismo matrimonio con su hija volvieron a ponerse cerca de nosotros sin quitarnos ojo, porque nuestra hija estaba todo el día encima de su padre y yo me sentía un poco incómoda ya con esa situación, por lo que le dije a Lorena que nos íbamos a bañar, pero yo me quedé en la orilla mientras ella se metía un poco en el agua, cuando veo que la mujer del matrimonio francés viene hacía mí, porque también se había acercado con su hija a la orilla para bañarse, y se puso a hablar conmigo: —A vuestra hija se la ve muy bien con su padre —me dijo con acento francés, dejándome un poco desconcertada por lo inesperado de la conversación. —Sí, ya sabes cómo se ponen las niñas de mimosas con los papás —le contesté, para quitarle importancia a esa escena. —Cierto. Como la nuestra, cuando tenía la edad de la tuya, estaba todo el día encima de mi marido también, y en casa no había forma de echarla de la cama, por lo que muchas veces se quedaba dormida con nosotros. —Jaja, normal, eso les pasa a todas creo. —¡Aja! Así que la tuya también le busca…. —Sí, prácticamente le acapara y no me deja ni acercarme…. Esa mujer era muy atractiva, rubia, voluptuosa, con pechos grandes y caderas curvilíneas, y siguió tanteándome con sus preguntas íntimas mientras yo intentaba disimular para no ...
... contarle demasiado a esa desconocida tan curiosa. —Jaja, estarás harta ya ¿Y cómo os arregláis parar tener las relaciones íntimas? —siguió preguntándome cada vez con más indiscreción. —Pues aprovechamos cuando se queda dormida. —Así hacíamos nosotros también, pero a veces se despertaba y nos veía. —Ya nos pasó también alguna vez eso a nosotros, menudo apuro, jaja —seguí intentando disimular. —Pero nosotros seguíamos igual, aunque mirara, porque no nos íbamos a quedar a medias. —Sí claro, a ver quién se para cuando estás casi a punto…… Seguía la conversación, un poco sorprendida de verme hablando esas cosas tan íntimas con esa mujer a la que no conocía de nada, pero ella era muy agradable y natural y no me sentía incomoda hablando de nuestras intimidades, y ella siguió intentando sonsacarme, porque supondría que no le estaba diciendo toda la verdad: —¿La vuestra ya se ha animado a participar con vosotros? Yo había oído muchas cosas sobre las familias liberales que frecuentan estas playas y empecé a sospechar que ésta era una de ellas, por el tono de la conversación, y estaba claro que ella intentaba averiguar si nosotros lo éramos también, así que me decidí a hablar ya claramente, porque nunca me había visto en una situación así y me podía la curiosidad y el morbo: —Sí, muchas veces se acaba metiendo ella por el medio también cuando nos ve —le dije, ya abiertamente. —Me imagino que las crías cuando nos ven a nosotros disfrutando, no se podrán ...