1. Encuentro apasionado


    Fecha: 25/12/2025, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Peli, Fuente: CuentoRelatos

    ... estaban bajo su asiento. Estaba tan absorto que el otro agente me tuvo que llamar la atención para que me diera cuenta de que el camionero ya se marchaba, agradecido y con muchas prisas, y que era el turno de mostrar mi documentación.
    
    Yo se la entregue toda, de golpe, absorto en la contemplación del cacheo de mi amante, pues para mí era ya evidente que la agente estaba manoseándola a conciencia… y yo, para mi sorpresa, estaba excitándome de nuevo, pensando en lo que le estaría haciendo.
    
    Imagínense como me quede al ver que la agente, con toda la tranquilidad del mundo, se separaba de mi amante, después de decirle algo al oído; y, tras abrir la puerta del descapotable, ocupaba el asiento del copiloto, sentándose cómodamente y haciendo un gesto a mi amante para que entrara también. No sé qué me sorprendió más, si ver la parsimonia con que la agente se estaba quitando los pantalones, o la docilidad con que mi amante entro en el vehículo, cerrando la puerta del mismo tras haberse arrodillado a los pies de la policía.
    
    Tanto el otro agente como yo habíamos comprobado que mi turbada amante llevaba ya los senos al aire al ocupar su sitio, señal inequívoca de que el cacheo había sido todo lo prolongado e intenso que yo había sospechado… y mucho más.
    
    Si en ese momento me hubieran preguntado les aseguro que no sabría decirles de seguro si lo que le estaba mostrando al otro policía era la documentación del coche o mi carnet de la biblioteca o del videoclub… y no era para ...
    ... menos, pues la cara de satisfacción de la agente, cómodamente recostada en el asiento no dejaba lugar a dudas acerca de lo que debía estar haciendo mi amante arrodillada a sus pies. Y con lo bien que maneja ella la lengua seguro que la agente estaba en el séptimo cielo.
    
    De eso no nos cupo ninguna duda cuando ambos vimos que se desabrochaba la camisa del uniforme, dándonos un vislumbre de sus pequeños y puntiagudos pechos desnudos, antes de tumbar el asiento del todo hacia atrás y desaparecer de nuestra vista. El motivo quedo bien claro cuando vimos el rostro sonrosado de mi amante asomar brevemente y desaparecer en dirección a su cara y a sus pechos. Su postura arrodillada sobre la agente nos permitía ver su culito desnudo por encima de la puerta del descapotable, ahora que su sufrida minifalda permanecía enroscada a su cintura, donde alguna de las dos la había remetido para que no molestara, y dejara todo al aire.
    
    El otro policía y yo ya habíamos dejado de fingir, y mirábamos absortos y embelesados la increíble escena que tenía lugar a solo unos metros de nosotros. No era para menos, mi amante ya estaba desbocada del todo y, aferrándose a la puerta y a uno de los asientos se irguió ante nuestra atónita mirada, moviéndose adelante y atrás frenéticamente, restregándose a conciencia contra la policía; de la cual solo veíamos uno de sus pies, apoyado en la esquina del salpicadero, pero que bastaba para hacernos una idea de lo bien separadas que estaban sus piernas.
    
    Aunque ...
«12...5678»