La sexóloga aconseja a una madre y a su hijo - Relatos Eróticos

La sexóloga aconseja a una madre y a su hijo

... vuestros miedos. – exclamó la sicóloga contenta –

-Si, es verdad, ya no me importa – respondió Cristina riendo – Es algo natural, solo son nuestros cuerpos.

-Venga, Cris, un paso más, muestra a Rubén como acaricias tu sexo, que no sea un tabú, que no sea pecado verlo.

Cris dudó pero al final lo hizo sin pensarlo, total, su hijo ya la había pillado masturbándose, no era ningún secreto. Metió la mano bajo la braga y pasó los deditos por su sexo.

Miró de nuevo a su hijo y vio su polla mirando al techo.

-Tócate, Cris, que tu hijo lo vea.

-Ummmm. Siiii, lo hago. Aaahh, lo hago ahora mismo. – respondió acariciando su vulva con los dedos –

Cerró los ojos y metió los deditos en su sexo, tocándoselo despacio, pasándolos por la raja de un lado a otro.

-Aaahhhh. – gimió de nuevo –

-Mírala Rubén. Es algo natural, tu madre se masturba como haces tú en tu cuarto.

-Si. – respondió éste nervioso –

Miraba a su madre con deseo, con lujuria contenida, le hubiese gustado arrancarle la braga de golpe y follársela allí mismo, pero al no poder, cogió la verga y comenzó a sacudírsela con la mano.

-Bien, muy bien. – exclamó Malena complacida –

Madre e hijo estaban masturbándose juntos, sin ningún miedo ni vergüenza, era un gran paso, un paso definitivo.

-Seguid tocándoos, no tengáis miedo, lo que hacéis va a uniros muchísimo, como nunca habéis pensado.

-¿Siiii? Aaahhh. - preguntó Cristina gimiendo –

-¿No lo ves? Sois madre e hijo y tenéis la confianza ...

... de masturbaros frente a frente, de compartir vuestro sexo. ¡Es magnífico!

-Siiiii. Es cierto. – respondió Cristina contenta – Aaahhhh. Pocas madres tendrán la confianza que nosotros tenemos ahora.

-Si, Cris. Muy bien. Ya vas cogiendo el ritmo, ya te vas dando cuenta que avanzamos deprisa. Y tu Rubén. ¿Qué opinas?

-Ufffff. Me gusta, me gusta mucho, ojala lo hiciéramos más a menudo. – respondió sacudiéndose la polla cada vez más seguido –

-Aaahh. Si, cariño, siiii….Ummm…lo haremos más veces. – contestó Cristina sin pensarlo –

Miraba la verga de su hijo y no apartaba la vista, era algo hipnótico, la tenia atrapada por completo, Rubén rodeaba su miembro con la mano y lo sacudía arriba y abajo con un movimiento continuo, como había visto en el vídeo grabado.

-Aaahh…Tócate mi vida…Ummm…tócate que yo te vea. – exclamó presa de un deseo incontrolable –

-Si, mami. Aahhh…mira como me hago la paja. – respondió él acercándose a su madre –

Cristina se metía los dedos cada vez más adentro, apartando la braguita con una mano y follándose el coñito con la otra, mostrando a su hijo su sexo desnudo frente a su cara.

-Ummmm. Mírame, cariño, mira como me toco. – gimió abriendo de par en par las piernas exponiéndose a su hijo –

-Ummm. Siii, mami, me gusta, me gusta mucho ver tu coño.

-Aaaahhhh. Míralo, mi vida…Aahhh…podrás verlo cuando quieras. – exclamó con un enorme gemido –

-Acércate a tu madre. – ordenó la sicóloga – Que tenga cerca tu polla, que vea como te ...