(5) Desorden
Fecha: 18/02/2019,
Categorías:
Transexuales
Autor: Caminante, Fuente: CuentoRelatos
... sensación que todo cambiaba deprisa.
- Vayamos, veremos que me tiene guardado el destino.
La miré, ella miraba al suelo.
- No me he olvidado de ti, divide ese dinero, hazlo tú y lo que decidas lo aceptaré.
- Así ¿A ciegas aceptas lo que decida? – Protestó.
- Si, esta gestión es tuya.
- Y si en vez de dinero terminas lo que has empezado.
- Sabes que no es posible, sé que debo terminar eso que empezamos, pero ahora no puede ser, esto parece una emergencia y ese dinero le necesito para trabajar con cierta tranquilidad y poder emplearme a fondo sin penurias económicas.
- No sé si creerte, tampoco sabes que va a ocurrir con tu tiempo y donde estarás, Hermética es posesiva y vengativa, no la subestimes.
- Si piensa que me va a tener encerrado se equivoca, ya que esta oportunidad me permite imponer mi criterio en ese sentido, sean esas dos pobres lo que sean, además pienso aprovecharme de la influencia de su padre sobre Hermética.
Movió la cabeza de un lado a otro, no lo aprobaba.
- Necesito que me prometas algo.
- Cuando sepa de qué tiempo dispongo lo tendrás.
- Quiero una prueba de sangre.
Enarqué una ceja sorprendido, no comprendía nada.
- No sé qué quieres decir.
- Quiero dejarte una señal en el hombro, quiero que mis dientes se manchen de rojo, quiero que ese rojo sea tu sangre, que depositaré en mi boca y que fotografiarás con mi móvil, la foto será mi boca con tu sangre que gustaré lentamente y con un deseo inquietante. De ...
... esa forma dejaré mi huella en tu cuerpo, haré pensar a las que vengan detrás.
- Pues date prisa, no tenemos mucho tiempo.
La realidad es que no era la primera, tampoco era algo complicado y de esa forma me quitaba una posible enemiga, ya que me daba la sensación de ser rencorosa.
- No puedes hablar, ni moverte, es un rito y no lo olvides, quieto y muy quieto. No comprobó si venía gente o no. Se desprendió de la ropa, me invitó a lo mismo, dudé, pero se lo había concedido. Me senté de nuevo en el banco, ella pasó una pierna por encima y quedó quieta, volvió para atrás y cogió el penetrador con su mano, y este despertó lentamente, aprovechó para metérsele ella misma, quedándose quieta, y pegando sus labios al oído me susurró hablando despacio, arrastrando las palabras.
Sentí la dureza de sus pezones, se apretaba contra mi pecho y se movió levemente, sentí ese roce desconocido y se vio reflejado en el penetrador, quise que creciera más, sentí esa ligera molestia en el glande de que no se podía hacer más grande y ella se movió levemente y me habló, pensé si lo había sentido.
- He sujetado un orgasmo, cuando todo esto termine, te dejaré que leas lo que he sentido y paladeado, siento como crecías dentro de mí, y lo guardo en lo más íntimo de mí ser, ya que siempre acepté ser mujer y para que sirvo. Yo Irish acepto tu cuerpo sin reservas.
Y se movió levemente, como si cabalgara pero empujando hacia mi pecho y con ese ligero movimiento clavó sus dientes en mi hombro ...