La historia de Ángel, solo era un muchacho (04)
Fecha: 27/06/2019,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos
... cumplir las fantasías de cualquier macho que me lo pidiera.
-Si, si que te lo daría, si no hay problemas con Eduardo. -entonces Damian me abrazó y me besó la boca metiéndome la lengua hasta el fondo.
-No te preocupes, yo sabré buscar el momento adecuado y el lugar, ahora recuerda que esto no debe salir de nosotros, somos cómplices, ¿de acuerdo? Tengo que ir a darle una pequeña lección de boxeo a este chico, ¿quieres quedarte?
Aún tenía tiempo antes de que Pablo llegara y además oiría el ruido de su moto.
-Vale, me quedaré un rato. -cuando entramos en la sala que yo conocía, el jardinero se había cambiado de ropa, una camiseta de tirantes negra le colgaba de los hombros dejando ver un pecho tremendamente peludo, y también los brazos delgados con mucho vello negro, un pantalón flojo y baboso hasta las rodillas y a partir de ahí sus piernas eran como dos palos cubiertos por una piel de rizados pelos que le servían como si fuera un pantalón.
Me recordaba a la figura de don Quijote, unos dibujos ilustrativos que había visto de él en un libro, solo le faltaba la perilla, estaba calentando con el punching que tenía la base en el suelo. Damian se marchó a su habitación y cuando volvió tenía una vestimenta muy parecida a la del otro, pero su cuerpazo era muy diferente, en él abundaban los músculos y tenía unas poderosas y fuertes piernas con pelo pero menos que el otro.
-Ponte el gorro protector, no querrás que te vuele un oido al primer golpe. -dejé salir una ...
... pequeña carcajada, porque había estado pensando que al primer golpe fuerte lo levantaría del suelo.
Se metieron en el cuadrilátero pintado en el suelo y comenzaran a jugar, bailando para calentarse, el delgadito era correoso y saltaba mucho moviéndose de un lado al otro, Damian no conseguía alcanzarlo y el otro, más ligero, conseguía llegar a cansarlo.
Damián no terminaba de reducir la calentura que agarró conmigo en el Buick, y no debía llevar slip debajo del pantalón, se le notaba danzar la verga marcándosele abultada en la tela. Pensé que Pablo se estaba retrasando y que quizá se hubiera tenido que quedar en la U, para algún trabajo.
-Me voy Damian. -se entretuvo para despedirse y su oponente le lanzó un derechazo al hígado.
-Cabrón tramposo, ahora verás por coger ventaja. lo rodeó con un brazo y le castigaba con el otro puño, el otro no se quedaba corto y le respondía pegando donde podía encontrar un hueco.
Marché bastante contento, la última escena de su pelea la había encontrado divertida. Estaba empezando a oscurecer y las luces de las cocinas estaban encendidas, decidí entrar por el ala donde Ana vivía, sería más difícil que alguien me viera y no se veía luz alguna.
Cuando llegué a mi habitación me di cuenta de que no había quedado concretada una nueva cita con Damian, y volví sobre mis pasos, me guiaba la luz que salía de la sala de boxeo y el brillo que reflejaban los cromados de los coches. Según me acercaba escuchaba fuertes jadeos que provenían de ese ...