1. Quiero la virginidad de mi hijo


    Fecha: 17/08/2019, Categorías: Incesto Autor: delnorte1, Fuente: RelatosEróticos

    ... lo que es estar con una hembra. Con una hembra de verdad… Ondulo un poco mi pelo rubio, estoy preciosa, me digo a mi misma. Me pongo un sugerente perfume en los pezones y las tetas, una braga semitransparente. El espejo me dice que estoy preciosa y me pongo excitadísima contemplándome a mí misma, y lo que le voy a ofrecer a mi nene…
    
    A la noche, ya estamos en mi habitación, un poco oscura, iluminada con una lamparita y un par de velas que he encendido. Es una pequeña puesta de escena. Desnudo a Borjita, despacio entre besos y mimos. Yo traigo un ceñidísimo vestidito de verano, verde clarito que me voy quitando ante su mirada expectante, feliz. Al ver mi tanga transparente y mis soberbias tetas, alcanza une erección espléndida, mi niño. Para sus añitos tiene una buena polla, aunque a mí me gusten mayores. Y mis tetas, redondas, firmes y duras, le amamantaron en su época.
    
    Me tumbo desnuda en la cama y le siento encima de mí.
    
    Acaríciame, cariño, todo el cuerpo y todo lo que quieras. Sin prisas, con mimo, como solo tú podrías hacerlo…
    
    -Claro que si mamá. Te quiero mucho. Eres una mamá única…
    
    Y así Borjita me va besando, juega con mis tetas duras, coge suavemente los mechones, rizados hoy, de mi pelo, que normalmente suelo traer liso. Acaricia mi estómago, mis muslos, mis hermosos tobillos… Conduzco su mano a mis ingles y allí empieza a hacerme cosquillas, jugar con los pelitos rubios de mi coño, acariciar los labios húmedos…
    
    De vez en cuando controlo su ...
    ... erección, dura ya como un mástil. Su pollita tensa el frenillo. El capullo apunta hacia arriba desafiante… Lo tumbo yo a él y comienzo suave a hacerle una mamadita. Noto en mi boca húmeda su sexo, excitadísimo, palpitante. Tengo que detenerme. Se me está excitando mucho. No quiero que se me corra. Tengo que sacarle su Virginidad. Y no puedo esperar más…
    
    Me paro un segundo a pensar si le pongo un preservativo, para que vaya cogiendo buenas costumbres. Pero no; quiero sentirle tal cual, y quiero que él me sienta en vivo. Del cajón de la mesilla de noche me tomo una pildorita. Quiero sentir su polla en las paredes de mi coño. Quiero que su prepucio y las terminaciones nerviosas de su glande sientan el tacto húmedo de mi coño maravilloso. Que el experimente en vivo el gusto que le puede hacer sentir el coño que le hizo nacer…
    
    -Móntame, mi amor. Hazme tuya. Entrégame tu Virginidad. Penétrame aquí. Yo te ayudó, yo te guío…
    
    No nos fue tarea fácil introducírmela. Aunque él lo intentaba, se le salía. Yo lo tomé de la polla varias veces para enfocársela, pero él se resbalaba en mi humedad y en su inexperiencia. Tras un rato conseguimos encajarla. –Ahora, ve dándome suave, cariño, a tu ritmo, como buenamente puedas. Cuando retrocedas no la saques muy atrás para que no se te salga. Ve flexionándote sobre mí, dame gusto, compláceme, y ante todo, goza tú, cariño. Hoy acabas de hacerte todo un hombre…
    
    Con sus manos apoyadas en la cama, Borjita va cumpliendo como puede. Contemplo sus ...