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Cosas de chicos I
Fecha: 26/10/2019, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... que chupárselo para que le entrara, como él había hecho conmigo, así que arrodillé y se lo chupé. Parece que Tato no se lo esperaba porque pegó un respingo al sentir mi boca, pero enseguida volvió a la posición y me dejó hacer. "¡Uf, qué bueno!" Me decía al tiempo que se abría más los cantos y me presionaba el culo contra la boca. Cuando se lo dejé bien mojado de saliva me paré para metérsela. No hubo manera. Por más intentos que hicimos mi pito era muy corto y sólo llegaba a apoyarle la cabecita. "No importa, cuando te crezca me la vas a poder meter" me dijo a modo de consuelo. Así que siguió chupándomela mientras se hacía una paja. A la tarde siguiente yo estaba ansioso esperando en la vereda que me pasara a buscar y no pude menos que sonreírme cuando lo veo venir con una botella de agua en la mano. Le avisé a mi mamá que me iba y nos fuimos al refugio. Yo me creía muy listo y previsor por haberme llenado los bolsillos con papel higiénico, pero el mellizo me ganó cuando sacó una toalla vieja que se había arrollado en el cuerpo bajo el pantalón y la camisa. Me cogió tres veces esa tarde, no voy a decir que no me dolió, pero fue menos y al principio. Nos lavábamos con el agua de la botella, nos secábamos con la toalla y seguíamos con la fiesta. Ahora con más variantes porque nos chupábamos las pijas el uno al otro, y también los culos que nos encantaba a los dos por igual. Previsores, buscamos un tacho adecuado donde dejar las toalla a resguardo por si llegaba a llover, y ...
... antes de irnos le pedimos agua a una vecina para ya dejarla llena en el refugio "Mañana traigo otra más - me dijo- así tenemos agua suficiente" A la tarde siguiente el primero que apareció fue Jere, que ya se había curado de lo que sea que le había agarrado, y no pude contenerme de contarle todas las novedades. Jere me mató a preguntas y se veía entusiasmado por probar también. Cuando llegó el mellizo, botella nueva bajo el brazo, medio que no le gustó que estuviera Jere, pero cuando camino al refugio le dije que ya le había contado todo y que quería probar también, le cambió la cara. Jere primero miró como le chupaba la pija a Tato, y luego se la dejé para que debutara y encaró sonriendo la tarea. La chupaba con entusiasmo y me asombró que le entrara más que a mí ya que parecía que no le provocaba las arcadas que me daban a mi cuando lo intentaba. Lo que no hizo el mellizo fue hacerle tragar la leche ya que quería hacerlo en mi cola. Yo me terminé de desnudar, me puse en posición y disfruté de la chupada de cola previa que me hacía Tato. Jere se pajeaba con todo viendo el espectáculo y ni bien vio que el mellizo me la sacaba luego de acabarme, se apuró a sacarse el resto de la ropa para probar también. Yo me fui a evacuar la leche y cuando volví Tato ya se había lavado la verga y Jere se la mamaba para parársela de nuevo. No le llevó casi nada estar de nuevo erecto, y Jere solito se puso en posición. Cuando el mellizo le fue a chupar el culito se lo encontró sucio por lo que ...