1. 51.3 Despedida con fiesta


    Fecha: 16/01/2020, Categorías: Gays Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos

    ... de cristal y no me vas a romper por esto, cuando me dañas protesto. –su pene fue saliendo y yo manchaba el suelo sin poder contener su semen en mi interior por la risa.
    
    Me giré y abracé su cintura, sujetando su miembro aun morcillón con mi mano.
    
    -Adoro a tu hermanito aunque a veces me haga daño, y a su hermano mayor también. –le di un beso en la mejilla y me metí tras la mampara de vidrio de la ducha.
    
    Una vez preparados llamé a mi madre para desayunar con ella, estaba en el comedor con Amadeo y nos estaban esperando, fuimos a recepción antes que al comedor, había pagado su cuenta y les pedí continuar ocupando la habitación de Gonzalo para no cambiar mi equipaje.
    
    Cuando entramos en el comedor Amadeo se levantó y vino a nuestro encuentro, no tuvimos tiempo de saludarnos y se abrazó a Gonzalo.
    
    -Perdimos una vez más, no vamos a volver a ganar una copa. –no sabía que a Amadeo le gustara tanto el fútbol para preocuparle de esa manera.
    
    -Sí, pero yo he ganado la apuesta a Raúl, y hubiera preferido perderla. –lo cierto es que Gonzalo sabía el resultado y yo desconocía como había podido enterarse.
    
    A mi madre la encontré pensativa y después de saludarnos nos acompañó en el desayudo, ella y Amadeo lo había tomado ya. Estaba tan ensimismada que no participaba en la charla que sobre el partido mantenían los chicos. Sí, aunque parezca raro a mi madre le gusta el fútbol aunque no tiene preferencia por un equipo.
    
    -Mamá te veo preocupada, ¿en qué piensas? -me mira ...
    ... sonriente haciendo un gesto con su mano para espantar sus pensamientos.
    
    -En las cosas que tengo que hacer la semana próxima, recibir tus cajas y ordenarlo todo, queremos ir al pueblo para pasar el verano, tengo que convencer a Aurora para que nos acompañe un mes, le sentará de maravilla cambiar de clima.
    
    La carretera está mojada y llueve en algunos momentos, suave a veces y otras con intensidad. Ya en Bélgica, al pasar Tournai el agua que cae del cielo obliga a Gonzalo a reducir la velocidad, coloco mi mano sobre su pierna.
    
    -Ten cuidado cariño, igual sería mejor que nos detuviéramos hasta que parara de llover. –los limpiaparabrisas no pueden arrastrar el agua que cae.
    
    -No tengas miedo, he reducido la velocidad y con este coche no corremos peligro. –para distraerme le pregunto a mi madre sobre sus planes para este verano y sobre otros temas que van saliendo.
    
    -¿Quién ha pagado la comida de Martine? -veo Inquieto a Gonzalo y no creo que sea por la lluvia o el tráfico.
    
    -Gonzalo se arregló con él, este chico es muy cabezota. –le miro con cierto reproche.
    
    -No puedes ir pagando todos mis caprichos, ya es suficiente que vaya a vivir a tu casa y me mantengas. –deglute y se le sube y baja la manzana de su garganta.
    
    -No ha sido nada, tu madre ha pagado lo que se ha consumido en el hotel, no tienes que preocuparte tanto, es el abuelo el que atiende todos los gastos.
    
    Llegamos perfectamente al aeropuerto y con tiempo sobrante, facturamos el equipaje y salimos de las ...