Cena de amigas
Fecha: 10/02/2020,
Categorías:
Infidelidad
Autor: fairydoz, Fuente: CuentoRelatos
... estos son unos inexpertos les faltan 10 años de maduración ahora sólo piensan en meter y no saben cómo —y las dos nos reímos.
Nos fuimos directas a la pista de baile y Antonio nos trajo unas copas y junto con su amigo se puso a bailar con nosotras.
Siempre me ha gustado hacer el tonto al bailar así que empecé a acercarme a Andrea bailando en plan guarrillo, acercándome a ella mirándola a los ojos y pegándome a su cuerpo y claro, como Andrea no es precisamente tímida, al final parecía que éramos una pareja lesbi agarradas espalda contra pecho.
Después de un rato paramos y fuimos a descansar a una barra y entonces vino Sebas a hablar conmigo.
—Vaya, no os cortáis un pelo —me dijo acercándose a mi oído
—Para un día que salimos hay que pasarlo bien —contesté yo haciendo lo mismo y al acercarme le cogí del brazo y note lo musculoso que estaba y lo bien que olía.
—Eso digo yo, hay que pasarlo bien. Tú no eres de la Escuela, ¿no?
—La verdad es que no, a mí la universidad me queda ya lejos.
—Anda ya, ¿cuántos años tienes? —Menudo cabrón, pensé, vaya preguntita.
—Algunos más que tú, y esas preguntas no se hacen
—No, si lo digo porque tienes un tipo espectacular, yo pensé que serías de mi edad —Ahora si iba bien encaminado el chaval, la verdad es que un piropo bien hecho de un tío tan bueno ya valía por toda la noche.
—Bueno, digamos que mi espíritu es de tu edad.
—Sí, creo que nos llevamos bien y esta noche sí que va a ser para pasarlo ...
... bien.
En ese momento me di cuenta que el tío estaba ligando conmigo así que para evitar males mayores decidí dejarle caer que era “esposa y madre en la vida”.
—La verdad, es que tenía ganas de pasarlo bien porque con los niños una acaba siempre agotada y los hombres nunca ayudáis —Bueno, ya estaba claro que no era una de esas niñatas deseando abrirse de piernas con el primer cachas que conocen.
—Eso ahora da igual, hemos venido a bailar y divertirnos.
En ese momento nos interrumpió Andrea.
—Vamos a ir a la casa que acaban de alquilar Sebas y Antonio para hacerle el bautismo de fiesta —Parecía muy ilusionada con esto, pero la Cogí el brazo y le dije:
—Si acabamos de llegar, no hemos empezado a bailar, a qué vamos a ir a casa de estos tíos si no los conocemos de nada.
—Yo si los conozco –me dijo muy seria —No te amargues son buena gente ¿Qué te pasa?
—Sebas estaba intentando ligar conmigo —se echó a reír.
—Vaya problema, no me digas que no sabes parar los pies a un niño que acaba de terminar bachillerato —Sonrió y mirándome picarona siguió —suponiendo que se los quieras parar porque el tío tiene un polvo que no se lo quita nadie. Venga, vamos un rato y si nos aburrimos nos volvemos.
Total, que salimos de allí y se vinieron con nosotras porque ellos no tenían coche. Llegamos enseguida y subimos a la casa que, la verdad, para dos estudiantes estaba bien. Era un ático de esos que tienen la ventana en el techo porque son abuhardillados y tenía un salón, un ...