1. Corneado, enculado, dominado y humillado


    Fecha: 02/03/2020, Categorías: Incesto Autor: Tothem, Fuente: CuentoRelatos

    ... este lugar del continente, unos tienen más otros menos. Esta circunstancia reforzó su convicción que ese matrimonio que tenía delante habían venido en plan turista y encima querían sacar esa tajada para sus negocios en su lugar de origen. Sentía que alguien debía ser castigado por todo ello. Como no era un escéptico, sino una criatura moral, estaba a merced de sus justas pasiones.
    
    – ¿No sabes para que sirve este palacete ? Esta para que yo pueda cepillarme a mujeres como la tuya – dijo Masu en tono despótico.
    
    Al abrir la luz pudieron observar un pequeño apartamento con un sofá a topos en el medio, las almohadas en el suelo, revistas de coches y mujeres desnudas esparcidas por todo el habitáculo; la puerta del dormitorio abierta dejaba ver una cama sin hacer, sobre ella camisetas, pantalones, slips, sostenes y tangas varios. El ambiente era cargante, olía a una mezcla de perfume de mujer y lefa.
    
    – Voy al baño un momento señores, agradecería que me preparas la yegua mientras hago mis cosas – dijo mirando a Felipe, al mismo tiempo que se dirigía hacia la única puerta cerrada la cual daba al baño.
    
    – No sé si hemos acertado Loli ¿tú estás segura… ? No tengo del todo claro…
    
    – Yo asumo todas las consecuencias, a lo hecho pecho.
    
    – Será como digas entonces.
    
    Pudieron observar como entro en el baño y sin cerrar la puerta se bajo la cremallera y orinó abundantemente, tiró de la cadena y volvió sin haberse subido la cremallera sin decoro ni pudor quedando de pie ...
    ... ante ellos con el pene semierecto y sacudiéndose la polla eliminando los últimas gotas de orina. Era un pene de grandes proporciones, nervudo, descapullado con un glande cabezón; alrededor de sus testículos llevaba un anillo que los resaltaba, como globos muy hinchados.
    
    – ¡Despelotaos los dos, quiero veros en pelota picada!
    
    Felipe y Loli sin ninguna sensualidad se quitaron las ropas, como quién se la quita para ducharse, de forma mecánica.
    
    – Los calzoncillos también y ella el sujetador, que se quede entangada.
    
    – Dónde podemos colocar la ropa – pregunto Felipe.
    
    – Aquí mismo, ¿qué te crees que tengo un guardarropa? – dijo Masu, cogiendo la prendas y tirándolas al suelo.
    
    – Vaya, que tenemos aquí… una media polla y una hembra en su declive, hubiera sido interesante pillarla años atrás – dijo en tono despectivo – Cógela por atrás y entrégamela, dame sus putas tetas.
    
    Felipe la cogió por atrás, agarro sus prominentes pechos por la parte baja levantándolos en señal de ofrecimiento. Masu altivo pellizco los oscuros pezones y los mordisqueo, escupió sobre ellos y los lamió. Loli empezaba a gozar, cerro los ojos, emitió pequeños suspiros. Masu aparto el tanga para ver la raja, la escrutaba. Los miró a los dos, tenía una expresión orgullosa, aprensiva y concentrada, al mismo tiempo que se quitaba la ropa y les daba la espalda para sentarse en el sofá abierto de piernas pajeándose. Los miró y sacudió la cabeza; sus ojos estaban inyectados de sangre y su cara roja para ...
«1...3456»