Corneado, enculado, dominado y humillado
Fecha: 02/03/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: Tothem, Fuente: CuentoRelatos
... otro al ladear sus cabezas.
– Las señoras primero – dijo al mismo tiempo que la penetraba analmente a horcajadas cogiéndola del pelo – ¡Toma! ¡Por puta! Que me aspen sin nunca habías tenido un cipote como este. ¿tú que miras imbécil? – dijo al verse observado por Felipe y en un rebrote vigoroso felino con impulso voraz retroactivado saltó sobre Felipe y lo enculó sin compasión, su polla era clavada una y otra vez hasta el fondo con rabia y fanatismo.
Felipe aullaba, gritaba como un poseso ¡NO! ¡NO¡ NO! ¡POR DIOSSSSS! Su zona anal se veía afectada, se había ensanchado sin dilatación: era usado como un animal. Llegado el momento de eyacular, Masu le dio la vuelta y le endosó todo el cipote en la boca vaciando dentro. Por sus comisuras resbalaba semen, de su nariz salía mucosidad. No bastando con esto Masu le introdujo los testículos uno por uno en su boca. Noqueado Felipe intentaba respirar y poner en orden sus ideas, su mujer lo miraba como si se apiadara de un animal. En un impulso Masu se levanto jadeante con su polla goteante, cogió la ropa de ellos, abrió la puerta y la tiró al ...
... rellano.
– ¡FUERA! ¡FUERA! No quiero más basura en mi apartamento.
Así, de esta guisa, se vistieron en el rellano y a medida que bajaban las escaleras iban abotonándose como podían. Al salir del edificio Felipe exclamo.
– ¡NO! HORROR ESTÁN AHÍ… – dijo mientras veía a sus tres amigos de viaje expectantes a la salida.
– Bueno, a quién tenemos, ¿que llevas en la cara Felipe? Estás resfriado, parecéis salidos de un tsunami. MUUU, so toro… – dijo uno de ellos en tono jocoso.
– Apenas puede caminar, se nota que te han toreado bien torito. MUUU, so toro. – dijo otro de ellos.
– ¡Apestáis a semental parejita! MUUU so toro – dijo el último.
Estaban hilarantes y empezaron a vociferar mirando la ventana del apartamento donde habían salido “torero, torero, torero, que le den la oreja, y el rabo también” –vocifero otro– “y vuelta al ruedo” – dijo el último.
Las persianas del apartamento se abrieron y salió Masu como si del papa en el vaticano se tratara blandiendo en las manos un sujetador y unos calzoncillos, mientras los compañeros gritaban HIP, HIP, HURRA; HIP, HIP, HURRA.