1. Historia de la frontera 1: Lorena


    Fecha: 19/05/2020, Categorías: Hetero Autor: Tonyzena67, Fuente: CuentoRelatos

    ... los músculos.
    
    —¿Déjame ver tu licencia por favor?
    
    —La tengo adentro de mi vehículo… debo entrar para mostrársela.
    
    —¡Está bien! La muchacha que se quede ahí, sin hacer ningún movimiento.
    
    Le digo a Lorena que no se mueva, que debo pasar al coche para obtener mi licencia. Ella sigue mis instrucciones y espera. El oficial parece ser buena persona, da un vistazo a mis documentos, no me pide nada más y se despide con una sugerencia: Tienes el derecho de estar aquí si gustas, esto es un lugar público, pero no te lo aconsejo, estos lugares son muy peligrosos.
    
    Lorena ahora no solamente tiembla del miedo, pero también del frio. Regreso al baúl del coche y le traigo la cobija que usé en mis días acampando. Ella sigue quejándose del frio y me pide que le toque sus manos, y realmente las tiene heladas; las tomo y las intento calentar con el calor de mi aliento.
    
    —Tony, esto no se lo contaremos a su primo, ¿verdad?
    
    —De que te visto desnuda y te has orinado en tus pantis.
    
    —¡Y que me has tomado del trasero!
    
    —Lorena, disculpa, realmente fue un instinto provocado por la tensión del momento. No quiero que me compares con esos tipos que te manosearon.
    
    —No, no te puedo comparar con ellos… sabes, esto que te voy a decir tampoco debe saberlo tu primo. Esa sensación que me has visto desnuda, que me has tocado el trasero, me ha gustado.
    
    Yo intuyo lo que está pasando por su cabeza, y a mis 18 años las mujeres me han hecho que sea directo con ellas. Incluyendo a mi ...
    ... querida madre, quien me enseñó a ser directamente expresivo y sin andar yendo por las ramas. Tomo el valor y se lo propongo:
    
    —Lorena, tu eres una linda chica, y solamente porque eres la novia de mi primo quizá no me he sobrepasado. En realidad, no culpo a esos tipos que te manosearon, pues honestamente, eres una gran tentación. Ahora imagínate, que te veo desvistiéndote, que te despojas de tu prenda más íntima, que he tocado tu trasero, pues realmente a mi excita; nos soy de palo o fierro. Si tú quieres que demos ese paso, que a mí me gustaría dar, pues nos olvidamos del primo por un rato, y te aseguro, al menos por mi parte que, por mí, él nunca se va a enterar.
    
    —Tony, ¡es que no sé! Hay algo en mí que me dice: atrévete. Pero, no sé… después pienso en que pensaras tú de mí. Eventualmente quizá seriamos familia.
    
    —Lo que yo piense de ti, que te valga un comino. Mira, todos pasamos por lo mismo, pero si esto te va a pesar por toda la vida o por un buen tiempo de tu vida, pues desde esa perspectiva, no vale la pena. Para mí, si es que tú lo quieres, serás una bella chica con la que tuve sexo y nada más. Mañana será otro día y es todo.
    
    —¿Me prometes que esto queda aquí?
    
    —No te lo tengo que prometer… a mí no me gusta hablar de mi vida personal, mucho menos de mi vida sexual con nadie.
    
    —¡Está bien! Demos ese paso.
    
    He conducido otros veinte minutos hasta un lugar que se me es familiar y que considero seguro. Estos lugares son semis desiertos, con pocos habitantes y ...
«1...345...8»