El día que cambió mi vida (Cuarta parte)
Fecha: 24/05/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: Martz Santo, Fuente: CuentoRelatos
... mañana usted ingreso ayer en la tarde aquí, por fortuna no pasó nada grave, está usted aquí muy bien y en un momento podrá salir, solamente me tendrá que firmar algunos papeles y podrá irse a su casa.
Perdón, podría contestarme usted algunas preguntas si es que sabe las respuestas?
Claro para eso estamos, qué es lo que usted desea saber?
Gracias, primero quiero saber si usted averiguó qué fue lo que pasó? luego quién me trajo aquí? y finalmente cuánto se debe de todo esto?
Bueno para empezar usted fue atacado sexualmente fue violado y esa persona intento asesinarlo estrangulándolo, por fortuna fue detenido por un indigente que desgraciadamente falleció al recibir múltiples heridas con arma blanca, hicimos lo que pudimos pero había perdido mucha sangre, ya vino un familiar y se llevó su cuerpo.
En cuanto a usted llego en ambulancia y un caballero muy elegante se encargó de pagar todo y de arreglar todas las cosas y ahora puede salir tranquilamente no se debe absolutamente nada? Algo más?
No, muchas gracias por todo.
De nada para eso estamos, sólo firme estos papeles y estos recibos y se podrá ir usted en cuanto guste.
Firmé todo lo que me puso enfrente y me disponía a salir pero ella me detuvo.
Espere, casi olvidaba algo, el caballero elegante que pagó todo está allá afuera esperándolo, no quiso decir su nombre pero me pidió que le avisará que aguarda para llevarlo a su casa en cuanto usted salga.
Gracias...
De nada, hasta luego.
Abandoné ...
... desesperado aquel lugar, en cuanto salí me puse a llorar, mi amigo aquel indigente que me mostró siempre su amor y que hizo todo lo posible para salvarme, dio su vida por mí.
Me sentí culpable, si yo no hubiera ido a ese lugar no habría pasado nada, el estaría aún vivo, estúpido de mí solamente provoque su muerte.
Me derrumbe llorando de rodillas, surgió un llanto incontrolable, me sentí tan culpable que apenas note cuando alguien puso su mano en mi hombro y me dijo;
¡Levántate anda vamos para tu casa!
Me abracé a sus piernas y le grité;
¡yo tengo la culpa, yo lo maté, fue por mí que le pasó todo eso!
Me tomó de los hombros y me obligó a pararme, luego me abrazo muy fuerte y me dijo;
Tú, no eres culpable eso fue un accidente y el cómo era una persona muy honesta y responsable quiso ayudarte, él era así por eso yo siempre lo aprecie,
Desconcertado le pregunté; tú lo conocías? Tú sabías quién era el?
Sí, mi familia era de clase acomodada y tuve acceso a muchas cosas entre ellas a las personas importantes de este país incluido Pedro y su familia, yo lo admiraba y cuando supe lo de los desfalcos, de los malos manejos, no creí en nada de lo que le imputaban pero no pude hacer nada para ayudarle.
Luego supe que le habían dado 20 años, mis padres no me dejaron ayudarlo en ningún sentido y me lo prohibieron, me propuse esperar el día de su liberación para poder ayudarlo pero llegué tarde, cuando encontré el lugar él ya se había marchado y por más que lo ...