La historia de Ángel, solo era un muchacho (22)
Fecha: 20/06/2020,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos
... entrepierna entre mis nalgas.
-¡Ohhh! Pablo… -pasé la mano detrás de mi cuerpo y la coloque sobre la verga intentando sujetársela.
-Tu verga Pablo.
-¿Te has acordado de ella?
-Mucho… ¡Ummmm!
-¿Te gusta?
-Sabes que sí, que me vuelve loco…
-Pero ahora tienes a Álvaro…
-Sí, pero quiero tu polla, la necesito Pablo. -sus labios no se apartaban de mi cuello llegando a lamerme el pendiente y el lóbulo de la oreja. En ese momento se apartó y me volví para mirarlo de frente.
-¿Qué pasa Pablo, ya no me deseas como antes?…
-Más, mucho más precioso, y en este momento me es difícil contenerme, no he estado con nadie desde que te secuestraron y estoy a reventar de deseo por ti.
-¿Y don Manuel y Ana María?…
-¿Aún le das vueltas a eso? Don Manuel tiene a Yasin y a todos los chicos que quiera, puede pagarse los caprichos que se le antojen por caros que le resulten. Ana María ha encontrado a su hombre, o cree que lo ha encontrado en el dueño del casino donde gasta a manos llenas el dinero de Eduardo.
-Yo te amo a ti Ángel, ¿no te has dado cuenta? -le miré terriblemente sorprendido y quise acercarme a él pero dio unos pasos hacia atrás hasta tropezar con el marco de la puerta.
-¡Pablo! Te dije una vez que te quería y me prohibiste que te lo dijera, que tenía que olvidarlo. -deseaba abrazarle pero me daba cuenta, sin saber el motivo, que él evitaba que entráramos en contacto y me contuve.
-Ahora puedo decírtelo, antes era tu instructor y tu estabas ...
... fuera de mi alcance, Álvaro te ha hecho libre y ya es diferente.
-¿Entonces por qué me rehuyes? No quieres que me acerque a ti y yo te deseo Pablo, y también puedo decirte que te amo, como al principio.
-No digas eso Ángel, quiero estar junto a ti, pero antes tengo que hablar de esto con Álvaro. Estas en su cama todas las noches, él también te ama y tenemos que arreglarlo, sabiendo que cuando tu elijas a uno de nosotros seguiremos siendo amigos. -me daba cuenta del tremendo enredo en que estábamos metidos.
-Pero yo os amo a los dos Pablo y no os quiero perder, no podría vivir sin uno de vosotros, no podéis ponerme en el dilema de tener que elegir, no quiero contemplar esa alternativa. -ya no podía contenerme y las lágrimas comenzaron a deslizarse por mis mejillas.
Pablo se acercó y me sujetó de los hombros zarandeándome para abrazarme a continuación contra su pecho.
-¿Pero qué podemos hacer? Alguno tiene que salir perdiendo.
-¡No, no Pablo, por favor! Vosotros encontraréis la solución. -le obligué a que bajara la cabeza abrazándole el cuello y pegué mis labios a los suyos.
-Os quiero mucho Pablo, buscaréis alguna manera para que estemos los tres juntos, ¿verdad que sí? -besaba desesperado su cara queriendo arrancarle una promesa que parecía imposible.
-No sabemos lo que opinará Álvaro, mi precioso pequeño, tengo que hablar con él y estar todos conformes. -al escucharle sentía que un rayo de esperanza empezaba a abrirse paso entre las sombras que antes ...