Memorias
Fecha: 27/10/2017,
Categorías:
Gays
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... ganando el campeonato). Rápidamente comprendí que estaba inhibido y un poco asustado de lo que estaba haciendo, se estaba cojiendo al hijo de su amigo, menor de edad, y en la cama de matrimonio, muy fuerte pobre diablo, en parte la calentura se le fue la noche anterior, con la mamada, en parte, y creo lo mas importante, lo sorprendió mi actitud decidida, dominando la situación.
Entonces a jugar el papel que se espera de mi...."Mi amor cuanto esperé estoooo, que placer me das, soy todo tuyo, tu putitoooo, cojeme como vos sabés mi macho divinoooo" y en verdad es que estaba gozando como nunca antes lo había hecho, esa pija con vida propia que se iba agrandando y endureciendo adentro mío, ese vaivén marcado por él, me estaba llevando al cielo , superando aún mis sueños mas grandes, no jugué mas me entregué, de cuerpo y alma me entregué a ese hombre para que me poseyese como quisiese, moviéndome al compás de su bombeo, acompañando con mis caderas, las penetraciones profundas, tirándome atrás para enlentecer sus salidas sintiendo la caricia tenue de su glande en mi zona sensible, disfrutando del orgasmo que crecía en lo profundo de mi vientre, su jadéo, sus vellos en mi espalda, los testículos en mis nalgas, apretándose en mi entrada, esos brazos fuertes atrayéndome en cada embestida, fabricándome tetas en la gordurita de mi pecho, sus insultos cariñosos con esa voz ronca que da el deseo, por primera vez, el placer iba acompañado por un ser vivo, un hombre, un macho con verga ...
... , huevos, brazos y piernas que me dominaban y me poseían tanto como el pistón duro y suave, mas placentero que el mejor consolador, con su ritmo propio, distinto al mío, pero acompasando mi placer, "me están cojiendo" me decía incrédulo, mientras mis labios soltaban todo tipo de gritos, gemidos, palabrotas que acompañaban mi excitación y pretendían incrementar la de mi macho...Mi macho, al fin me sentía como quería, hembra poseída por un macho, mi agujero relleno por su carne, horadado una y otra vez por esa virilidad maravillosa, estrujado por sus brazos, dominado por sus piernas, a su entera voluntad para que me llevase al colmo que desease.
El mete-saca, las caricias, el cuerpo, caliente y velludo, sobre mi piel, su respiración agitada en mi cuello....todo eso fue haciendo crecer mi placer y mi excitación, estaba como en un delirio, solo sintiendo ese cúmulo de sensaciones variadas. Sentí que me iba a acabar...creo que el sintió lo mismo, la verga creo que se le puso mas dura y grande, por lo menos así me pareció..."Acabame negroooo, acabameeee bien adentro....llename de lecheeee..."grité en mi paroxismo, creo que esa fue la señal para que su excitación llegase al máximo, sus manos tomaron mis caderas, irguió el cuerpo, y empezó un bombéo largo y violento que casi me vuelve loco de placer.."Te voy a llenar el culo...guacho divino, mi putito...", y me la enterró hasta el fondo, una, dos,cinco veces, mientras lanzaba un grito salvaje, casi un estertor. Supe entonces que ...