Secreto a cuatro voces 4: el punto de quiebre
Fecha: 07/08/2021,
Categorías:
Transexuales
Autor: Sirena y Triton, Fuente: CuentoRelatos
... y Carolina lo besó varias veces hasta que los dos se besaron intensamente. Se les había olvidado incluso dónde estaban, hasta que Pablo, uno de los amigos que se encontraba en la misma mesa, les dijo riéndose: “Váyanse a un Hotel… busquen un cuarto”. La pareja reaccionó de inmediato, y fue inevitable para Carolina reírse copiosamente.
Ya Roberto estaba entusiasmado y no iba a ceder tan fácilmente. Siguió acariciando la pierna de su esposa, aprovechando lo largo del mantel de la mesa. Carolina le rozaba el pene de vez en cuando y de tanto en tanto se lo apretaba. Después de un rato de este manoseo, pararon un rato para que a Roberto se le disimulara un poco la erección y se pararon a bailar.
Luego de dos piezas de merengue y una de salsa, Roberto tomo del brazo a Carolina y salieron del salón de baile, pero no se detuvieron en la mesa donde se habían sentado desde el inicio, sino que siguieron caminando. Al percatarse de ello, Pablo casi gritado les preguntó: “¿Para dónde van?”, a lo que Roberto contestó con tono de broma: “Vamos a buscar un cuarto”. Los tres rieron y la pareja siguió caminando hacia donde estaba el jardín.
A unos pocos metros y viendo que nadie los estaba observando se metieron en un baño que se encontraba en uno de los rincones del jardín. Pensaron que era un baño de servicio, pero no, era amplio y estaba muy limpio, parecía que estaba destinado para las fiestas que se centraban en el jardín. Olía bastante bien, por lo que era evidente que los ...
... asistentes a la fiesta no lo habían usado.
Pero aun cuando se habían cerciorado de la vista de posibles intrusos, no se percataron que Tamy los había estado observando, y conociendo sus andanzas, sabía que algo estaban tramando. Esta le apretó el brazo a César y le hizo un gesto para que mirara hacia el jardín, para que viera que Carolina y Roberto estaban entrando en el baño, y con un tono de broma dijo: “Voy al baño”, con intenciones de que César la acompañara, pero este tenía la esperanza de vivir con Berta algo parecido a lo que había vivido con Carolina, y por eso no la siguió de inmediato.
Tamy se fue hasta el baño y llegando a la puerta, oyó como Carolina y Roberto se reían y se besaban y murmuraban algunas cosas. Cuando trató de abrir, se dio cuenta que la puerta estaba cerrada. Pero ya con bastante excitación en la cabeza, toco y dijo: “Carolina, soy yo, Tamy… por favor abre la puerta”. Hubo unos segundos de silencio y luego se oyó que quitaban el seguro de la puerta. Tamy entró y vio que ya Carolina no tenía pantalones y que Roberto tenía una tremenda erección debajo del pantalón. Carolina le dijo a Tamy: “Ya tenemos confianza... si quieres puedes ver un rato… incluso te puedes tocar”. Tamy cerró la puerta y se sentó en un pequeño muro que estaba al final del baño. Carolina le desabrochó y le bajó los pantalones a Roberto y miró pícaramente a Tamy.
Roberto se sentó sobre la poceta y Carolina se subió sobre él y comenzó a cabalgarlo. Apenas se introdujo el pene, ...