Secreto a cuatro voces 4: el punto de quiebre
Fecha: 07/08/2021,
Categorías:
Transexuales
Autor: Sirena y Triton, Fuente: CuentoRelatos
... ella se movía como si hubiera tenido años sin sexo. Roberto le agarraba las nalgas y se las apretaba, esto excitaba cada vez más a Carolina. Aceleraba y aceleraba el ritmo, ya no podía aguantar mucho y ella terminó por primera vez. Tamy se tocaba, pero todavía no se quitaba la ropa. Mientras Carolina descansaba un poco recostada sobre el pecho de Roberto, este le continuó apretando las nalgas para que no se perdiera la excitación.
Carolina estaba por comenzar nuevamente cuando se oyó nuevamente la puerta. Y se oyó: “Abran, es César”. Tamy se levantó y abrió la puerta. César entró y vio a Carolina sobre Roberto ya un tanto jadeante. Cuando se dio cuenta que Carolina comenzaba a cabalgar a Roberto, se sentó con Tamy en el muro del fondo y comenzó a tocarse el pene. No tardó mucho en sacárselo para masturbarse. Cuando Tamy se dio cuenta de que el miembro de su esposo ya estaba totalmente erecto y fuera del pantalón, se agachó y comenzó a chupárselo. A pocos metros se oía la fiesta, la música, los gritos, incluso los chistes de Manuel en un tono cada vez más fuerte. Pero dentro del baño Carolina se metía el pene de Roberto con todas las ganas que tenía y Tamy le chupaba el de César como hacía tiempo no se lo hacía.
César le tomo la cabeza a Tamy y trataba de meterlo más en la boca. Roberto comenzó a tratar de meterle un dedo en el ano a Carolina, y esta comenzó a decirle: “Eso... anda, métemelo en el culo… me encanta el huevo por delante y el dedo por el culo”. César se ...
... puso frenético, quería meterlo hasta la garganta de Tamy, pero esta al ver que casi se ahogaba por lo profundo que lo tenía metido, se levantó, tomo una gran inspiración y comenzó a quitarse el pantalón. Ya sin ropa, se subió encima de César, pero no era muy cómodo, por lo que se paró y se agachó recostándose a la pared, mostrándole todo su culo a César. Este se levantó y con Tamy en esa posición le introdujo su pene por la vagina. Tamy gemía y sólo decía: “Así, así… así”. Muy poca ropa entre los cuatro, pero todavía mantenían puesto los antifaces, lo que lo hacía un poco más excitante.
Con el calor del momento Carolina y Tamy estaban terminando al mismo tiempo, y en el medio del orgasmo, se oyó nuevamente que tocaban la puerta. Carolina se mordió los labios y los apretó contra Roberto y Tamy se puso una mano en la boca para que no se oyeran tanto los gemidos. Y se escuchó al otro lado de la puerta: “César, no sé qué le estás haciendo a Tamy, pero ya van casi 30 minutos desde que se vinieron al baño”. Era Manuel riéndose de la situación. Lo que no sabía era que dentro la temperatura sexual estaba hasta las nubes.
Mientras que retomaban un poco el aliento, César contestó: “Tranquilo, estamos bien… sólo estamos conversando”. Y se rió para que lo oyera Manuel. Pero este no se iba y continuó preguntando: ¿Qué van a hacer después de la fiesta… van para otro lado? César le dijo, mirando a Carolina y Roberto: “Nos vamos para un Hotel”. Manuel se rió y les dijo: “¿Puedo ir con ...