1. Secreto a cuatro voces 4: el punto de quiebre


    Fecha: 07/08/2021, Categorías: Transexuales Autor: Sirena y Triton, Fuente: CuentoRelatos

    ... sexual; ambas de más de 40 años; Arturo de unos 19 años, bastante delgado, de estatura media, blanco, y en plena efervescencia sexual; y Manuel. Los cuatro a espiar a dos parejas en un Hotel.
    
    Al llegar al Hotel, sorprendidos, se dieron cuenta de que los vehículos de ambas parejas estaban en el estacionamiento. Y Manuel sin la más mínima pena llamó a Tamy:
    
    Manuel: “Hola Tamy, nos vinimos a Los Patios… ¿qué te parece?”.
    
    Tamy riendo: “¿En serio?... ¿y con quién viniste?”.
    
    Manuel tratando de hablar seriamente: “Yo les dije… estoy con Jhocelin y María Elena… y adivina qué, aquí también está el vehículo de Carolina y Roberto”.
    
    Cuando Tamy oyó esto, tapo la bocina y le comentó a César, y estos sin percatarse de las implicaciones del asunto y sin prestarle mucha atención a si Manuel decía la verdad o no, por la sola idea de que Carolina y Roberto estuvieran también en el Hotel, continuó:
    
    Tamy: “No lo puedo creer… estamos en la habitación 508… si quieren vienen… y luego llamamos a Carolina”.
    
    Manuel totalmente atónito: “Ok… nos vemos en unos minutos”.
    
    Tamy llamó a Carolina y confirmó que estaban en el mismo hotel, y que estaban en la habitación 705, dos pisos arriba de ellos. Y ya planeaba con César la forma de acercársele, cuando se oyó la puerta. En ese momento se percataron que habían invitado a Manuel sin darse del todo cuenta. Tamy ya se había cambiado de ropa y con los tragos en la cabeza y la noticia de Carolina y Roberto, abrió la puerta con un traje de ...
    ... encaje bastante sugerente y todavía tenía el antifaz. Ella pensó que sólo era Manuel, pero de pronto entraron a la habitación Jhocelin, María Elena y Arturo, y por último Manuel. Aquello parecía que la fiesta hubiera continuado.
    
    Después de reírse un rato, Tamy pensó que la mejor manera de acercarse a la habitación de Carolina y Roberto, era colocando como excusa a Manuel y por eso le propuso al grupo ir a la 705 para “darle una sorpresa a Carolina”, mirando pícaramente a César. Todos se rieron y se dispusieron a ir para la otra habitación. Tamy llamó a Carolina y le preguntó si podían ella y César ir para allá, a lo que esta le contestó, que si querían continuar con lo del baño, que subieran. Esto había sido más fácil de lo que había pensado, pero ya había metido al grupo en el asunto y tendrían que subir todos. Jhocelin y María Elena parecían dos niñas a punto de hacer una travesura; Arturo no sabía qué hacer, los nervios le decían una cosa y la hormona otra; y Manuel quería vivir la experiencia hasta donde se pudiera.
    
    Tamy tocó la puerta de la 705 y apenas Carolina abrió la puerta, entraron todos de un solo golpe. Carolina estaba en ropa interior y Roberto ya estaba dispuesto al sexo sobre la cama. Ambos ya estaban muy excitados. Al punto, que después de unos minutos incomodos no pusieron reparos al asunto y Carolina les dijo: “Nosotros no vamos a parar… si todos quieren ver… adelante… pónganse cómodos…” y se rió. Manuel ni corto ni perezoso se sentó en una silla que ...
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