El sueño jamás soñado 2
Fecha: 04/02/2021,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... a ver que les va a gustar!
Eso es lo que hice. Se sentía muy lindo.
-Ahora movete. Sacá y entrá. Dale.
A las dos o tres sacudidas Lidia comenzó a acompañar con su cuerpo, para adelante, para atrás.
-¡Aaahhh! ¡Aahhh! ¡Qué lindo!
-No vayas a acabar.
-¡No, no! ¡Todavía puedo aguantar!
-¿Te gusta nena?
-¡Si! ¡Si! ¡Mucho!
-Bueno, ahora sacala, Dany. – Tati daba todas las “instrucciones”. - Ahora sí. Date vuelta, ponete de espalda, vos subite y comenzá a cabalgar.
-¿Cómo?
-Te explico. Sentate sobre Dany, pone la pija en tu concha y cabalgá como el llanero solitario.
Lo hicimos. Tati le enseñó a tomar la pija con la mano y guiarla hasta la entrada.
¡Cómo cabalgaba! La nena saltaba como acróbata.
-¡No tanto! – Grité. - ¡Se escapa!
Cuando acababa se apretaba contra mí, cerraba los ojos, me escurría la pija y me inundaba.
-¡Hay nena! ¡No aguantó más!
La atraía hacia mi cabeza y le chupaba los pezones, casi más grandes que sus tetitas.
-Bueno, levántate ahora y ponete boca arriba.
Lidia se levantó, toda chorreando de jugos y se puso boca arriba.
-Levantá bien las piernas. – Tati seguía con sus instrucciones. Lidia obedeció.
-Ahora metesela. – Eso era para mí.
Era una posición magnífica. Le veía la concha, las tetas y el rostro. ¡Cómo en el paraíso!
-Dale, bombea. Cuando sientas que te viene avisás.
-¿Quién, yo?
-Vos no, sonsa. Vos podés acabar todas las veces que quieras.
Lidia acababa una trás otra. No paraba.
-¡No te apurés tanto!
-Es que no lo ...
... puedo evitar. ¡Me gusta mucho!
-Tranqui Dany. Cuando lo sientas sacala y ponela entre las tetitas de la nena. Dale.
-¡Siiii!
Se la saqué y acomodé la pija entre sus tetas.
-Bueno, ahora dale.
Lidia estaba con los ojos cerrados agarrando la colchoneta con fuerza.
-¡Dale Dany, con todo!
-¡Siiiii, me vieeeeeneeeee!
Lidia abrió los labios, siempre con los ojos cerrados. Puse el glande entre su labios y saltó el primer chorro.
-¡Ahora! – Tati no dejaba de dar “instrucciones”. Parecía que fuera ella la que estaba cogiendo.
La metí hasta el fondo.
-¡Agggg! ¡Me ahogggogo!
La saqué y teminé acabando sobre su cuello y sus tetas.
-¿Que tal? ¿Cómo fue?
-Hermoso. Me gustó mucho y tu lechita es riquísima. ¡Me gusta mucho, mucho!
-¡Muy bien chicos, son geniales! ¿Viste nena que todo es hermoso?
Lidia y yo nos tiramos boca arriba en la colchoneta. Estaba exhausto pero contento. ¡Fantástico! Estiré el brazo y acaricie su concha, totalmente mojada. ¡Miles de litros!
-Bueno, descansá un ratito. Ahora me toca a mí. Correte nena. - Tati no quería perder tiempo. Con su boca apuró el trámite. ¡Sus mamadas eran de exposición!
Lidia le dejó el lugar a Tati. Llevantó las piernas y me pidió que fuera… y fui. La concha de Tati, peluda y veterana de 23 era igualmente hermosa. Mi pija por sólo entrar temblaba… y Tati también.
-Acariciame el clítoris con el glande.
Seguí sus instrucciones. Tati cerró los ojos, apretó los labios y se mandó un orgasmo brutal.
-¡Muy bien nene! ¡Muy ...