Los blanquísimos jamones 5
Fecha: 11/02/2021,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... ella, recogió las piernas y… ya vez lo que pasó. ¡Te hipnotizó! – Patricia se reía radiante. Una mujer extremadamente hermosa. “Peligrosamente” hermosa, como Romina.
-¡Jajaja! ¿Nunca lo hablaste con ella? – Romina ponía más datos. – Vos le dijiste que sus “blanquísimos jamones” te hicieron perder la cabeza y olvidaste de por qué estabas allí. ¿Recordás?
-Y los toquecitos en los hombros… ¿pensás que fueron inocentes?
-La circunstancia de que nosotras necesitáramos un ingeniero fue mera casualidad. Si no le hubieras gustado cuando hablaste o sonreíste, hubiera sido solamente un mero intento de flirt y nada más.
Estas increíbles mujeres, parecían realmente una única persona, de cómo actuaban, pensaban y hablaban.
-¡Jajaja! Si cualquiera de nosotras te hubiéramos conocido 20 años atrás tampoco te hubiéramos dejado escapar!
-Eso me pone mal…
-¿Por qué?
-Porque en algún momento pensé que esta situación, la de haberme elegido para ser el padre de vuestro hijo, que yo podría pensar que me honra, al final podía traer conflictos entre ustedes…
-¿Y qué conflicto trae? Estamos totalmente de acuerdo, en lo que hacemos.
-Pero si decís que si me hubieran conocido hace 20 años…, bueno las cosas entre ustedes… hubieran sido muy distintas… - Yo me sentía bastante “entrampado” en esta situación. - Pero es sólo una suposición, nada más. El hubiera o hubiese no existe…, las cosas son como son… Además hace 20 años ustedes eran unas nenas…
-¿Así? ¿Con la edad de Araceli? Nosotros somos ...
... nenas… y Araceli ¿qué?
-Mejor me voy a dormir, sino me van a hacer pelota…
-No, no, Dany, para nada, ¡sos un amor! – Patri se levantó y vino hacia mí. Me tomó la cabeza y me besó en los labios, muy dulcemente. ¡No hay duda, las “seductoras” son ellas!
-Tranqui. Voy hacer café. - Romina se levantó.
Patricia, que estaba en otro lateral de la mesa, a mi izquierda, trajo su silla a mi lado.
-Dany, de verdad, no sos un “padrillo”, ni un “objeto sexual”, ni un “sometido”, ni nada de eso. Ya lo hablamos. Queremos que seas el padre de nuestro hijo, porque sos el mejor hombre que conocimos…, y además, en todas estas semanas de relación profesional, sentimos…, las dos -¿eh?- tener un “metejón” con vos. ¡SÍ! ¡No me mirés con esa cara! Lo hablamos entre nosotras. ¡Queremos acostarnos con vos! ¡Tener sexo! ¡Hacer el amor! ¡O como quieras llamarlo!
Yo no sabía qué diablos decir.
-En definitiva… coger… ¿no?
-¡Justamente! Tal vez nos despertaste el dormido hetero que teníamos dentro! ¡Jajaja! – Patricia me había pasado el brazo por el hombro, rodeando mi cuello. - ¿Sabés Dany? ¡Somos las bisexuales de un solo hombre! ¡Y te queremos comer!
-¡Jajaja! – Romi traía el café. – Como vez, Patri es muy convincente.
-Con todo lo que dicen, no sé cómo comportarme como ustedes esperan que me comporte. – Yo hablaba medio en serio y medio en broma, sonriendo los más relajado posible.
-¡Pero tesoro! – Romina estaba sirviendo. Dejó la cafetera y me miró. - ¡Cómo te comportaste conmigo ...