Sofía, una catrachita siempre mojadita, siempre calientita
Fecha: 13/03/2018,
Categorías:
Grandes Relatos,
Autor: Tonyzena67, Fuente: CuentoRelatos
... pues realmente estaba extremadamente excitado, pero de repente se apareció una muchacha, viéndose en el reflejo de los cristales de la ventana y quien parecía se arreglaba la cabellera. Aquello me sacó de donde estaba, pero, aun así, seguía taladrando la cuquita de Sofía. Quería volver a sentir aquella sensación de gloria y le pegaba un embate realmente violento a la conchita de Sofía, que parecía que ella era la que llegaría de nuevo a otro orgasmo. La chica de la ventana se ha acercado a los cristales y realmente no se el por qué, pues no debería vernos porque son polarizados, pero creo que ha escuchado los gemidos de Sofía, pues desde hace minutos son muy elevados. De repente Sofía llega al orgasmo y gime profusamente diciendo: No pares, dame verga, méteme toda la verga. Dale verga a tu “cuquita”.
He visto como la chica del cristal ha cambiado su expresión y ahora sabe de qué se tratan los gemidos y ha dado la vuelta apresuradamente y se ha ido. Yo con los gemidos de Sofía me he excitado y quizá últimamente con el morbo de que aquella chica ha oído como le he sacado otro orgasmo a esta puta, y me he ido en una exquisita eyaculación. Veo a Sofía que respira profusamente, y con otra sonrisa vuelve a decir: ¡Que delicioso orgasmo me has sacado! Raras veces me vengo de perrito. Con unas toallas higiénicas como las que se usan para limpiar a los niños, Sofía me ha limpiado y me da ese cumplido halagador: Mira, a tu edad y con esa resistencia, eres increíble, realmente me ...
... has sorprendido.
Fue el momento que Sofía confiesa algunas cosas de su profesión y me dice: Mira, aquí vienen muchachos y en el baño eyaculan en mis tetas, y muchas veces ya para la segunda ya no aguantan. Me rio y le digo, pues también estoy viendo el reloj y me quedan 15 minutos de placer que pienso aprovechar, pues para mí son alrededor de $80.00: - Yo estoy listo para el segundo, y solamente me quedan 15 minutos. Ella sonríe y me dice: ¿De veras, tienes para un segundo? -Asistí con un ademán de afirmativo, pero fui directo al decirle que quería que me diera su culo. Ella dijo lo siguiente con otra sonrisa:
—Este culito te va a costar otros $300.00.
—¡Pensé que ya estaba incluido en el precio! Tu publicidad en el perfil, habla de cumplir todas mis fantasías y estipulas el precio por tu tiempo.
—Lo sé, pero eso es algo extra, pues realmente duele. Y vos tenes una verga que, si no es la más grande, pero si es bastante grande y gruesa para causar daños.
—¡Bueno! Me tendré que ir decepcionado, pues pensé darme una hora de placer por el día de mi cumpleaños. ¡Ni modo!
—¿De veras es tu cumpleaños?
—Si. – le dije
—Mira, solamente si es tu cumpleaños, pero me tenes que mostrar tu identificación para poder comprobar que no me engañas, y solamente así y bueno, porque me has sacado ya tres ricos orgasmos.
—Pensé que solamente habían sido dos. -le dije.
—No, me sacaste uno cuando te montaba, pero te tenia de frente y solamente lo goce cerrando mis ojos. ...