Mi vida cómo perra - Relatos Eróticos

Mi vida cómo perra

... dedos con fuerza explorando a fondo. “parece que está muy dilatada. voy a ver hasta dónde dilata.” Saco del maletín un especuló y sin más se lo metió por el culo. Empezó a abrirlo hasta que encontró resistencia y la gorda empezó a quejarse. Por el espejo del techo yo podía ver el agujero abierto. Se volvió a mi Dueño “Está muy dilatada.” El se levantó del sillón y vino hacia nosotros. Miró el agujero. “Aun se puede un poco más”. Dio un par de vueltas más, hasta que ella empezó quejarse. Entonces, él sacó otro especulo y se lo metió por el coño. “Vamos a ver este agujero que me parece grande”. Estuvo un buen rato dando vueltas al tornillo, hasta que ella empezó a quejarse. “Es enorme, cabe un bus. No te dará mucho gusto follarla”. “ No (dijo mi Dueño) por eso prefiero follar a la perra”.Mirando hacia arriba podía haber los dos agujeros exageradamente abiertos. El del culo mostraba el interior del recto sonrojado y lleno de flujos. El del coño era muy grande y dejaba ver con claridad el interior de la vagina. Entonces cogió dos velas gordas y las encendió. Dejaba caer gotas de cera ardiendo en el interior de los dos agujeros. Ella se retorcía y chillaba cómo un cerdo colgado en el matadero. Mi dueño la sujetaba de una pierna para que no se moviera y el otro no fallara la puntería. También dejaba caer la cera sobre las nalgas, la barriga y los pechos qué enormes colgaban cómo globos. Se volvió a mí dueño para preguntarle. “por cierto, cuánto tiempo hace qué no has ordeñado a la ...

... perra?”. El le dijo que más de un mes.“Pues seguro que ya tiene buena carga de leche. Y qué método utilizas para ordeñarla?. El dijo que la gorda me sujetaba del cuello y con una mano dentro de la boca, el procedía a masturbarme fuertemente. “es un sistema muy bueno porque es muy incómodo para la perra pero no le sacarás toda la leche, de esa forma siempre le queda algo dentro”.Dando la espalda a la gorda se vino hacia mí a y empezó a tocarme la polla y los huevos.” parece que los tiene llenos de leche” le dijo a mí dueño. “ te voy a enseñar un sistema que los deja completamente vacíos”. Dejó a la gorda colgando y quejándose y vi cómo abría el maletín. Sacó un tubo metálico no muy grueso y unos cables. Me hizo apoyar la cara en el tablero de la mesa y levantar el culo. Sacó un bote de lubricante, y se unto dos dedos, sin dudarlo, me los metió por el culo, moviéndolos dentro para untarme bien. Los sacó y noté como me metía algo frío, era el tubo metálico. Entraba bien, pues no era muy gordo, pero sí largo, ya que me ocupó todo el recto. Al extremo que me sobresalía, conectó los cables. Mi Dueño, me estaba acariciando la cabeza para tranquilizarme, pues se dio cuenta que estaba asustado. Oia quejarse a la gorda, sin que le hicieran caso. Tenía el cuerpo lleno de cera y sus agujeros abiertos al máximo. Mi torturador, puso un vaso de plástico debajo de mi pija que estaba completamente fláccida. Y noté una descarga eléctrica que me hizo temblar. Miré el vaso, y vi que estaba casi ...