1. Mi esposa Sofía: Demasiado hermosa para un solo hombre


    Fecha: 02/11/2021, Categorías: Infidelidad Autor: Abraxas1605, Fuente: CuentoRelatos

    ... entre el encaje y su falda, mientras deslizaba su mano sobre su ella para estirarla cada vez que podía.
    
    Nuestra rutina siempre era la misma me estacionaba calles antes de la empresa en un mercado y ella caminaba a la oficina para después llegar yo. Esta vez no quería que fuera así pero no hubo más remedio. Ella bajo y tan pronto piso la banqueta todos los que trabajan en las verdulerías le empezaron a decir majaderías. Esa falda solo hacía imaginar muchas cosas, pues como a muchos hombres en su mayor prefieren una mujer vestida sexy que desnuda por completo pues la imaginación hace de las suyas.
    
    La perdí de vista mientras me estacionaba, no podía disimular mi miembro que se alzaba en los pantalones al pensar el camino que habría de recorrer hasta llegar a su cubículo.
    
    Al llegar me di cuenta que ella no estaba en su lugar y aunque somos del mismo piso nuestros sitios de trabajo están alejados de extremo a extremo. Disimuladamente pregunte a una compañera quién se limitó a decirme que tan pronto había llegado nuestro jefe le había llamado a su oficina. Ese viejo degenerado siempre buscaba la forma de hacerse de mi mujer y estaba seguro que no había perdido tiempo para aprovecharse de ella, pensé.
    
    Mis celos no podían nada ante esta situación, habían pasado casi medio día y Sofía seguía encerrada en esa oficina, no pude más y tomando una carpeta para ocultar mi erección me dirigí al piso donde se encontraba su oficina, noté que no había nada cerca de la puerta e ...
    ... intente escuchar, pero las puertas eran gruesas especiales para que no saliera ruido. Como pude busque cualquier pequeño hueco que las persianas permitieran la vista hacia aquella oficina donde mi esposa llevaba por lo menos 3 horas.
    
    Mi búsqueda dio resultado y pude ver a mi esposa sobre una escalera bajando libros que aquel morboso viejo le pedía, pude ver que estaban pasando libros de contabilidad de estante a estante al menos eso fue lo que pude intuir.
    
    No podía más con mi erección pues la falda ajustadísima y corta se había subido dejando visibles sus piernas y el encaje del liguero, mientras el viejo gordo estaba atrás de ella disfrutando del enorme culo de mi esposa, noté que también su saco no estaba y se notaba acalorada supongo que nuestro jefe había apagado el clima para forzar a mi esposa mostrar su busto forzando los botones de la blusa.
    
    No pude más la visión de mi esposa mostrándole su cuerpo en esa posición a su jefe me causo demasiada excitación. Sabía que ella estaba nerviosa y quizás, más bien seguro que estaba un poco excitada quizás por las miradas de aquel viejo, pero sus mejillas estaban coloradas, esas mejillas que me vuelven loco cuando estamos haciendo el amor por su color rojo que toman demostrando su calentura y timidez.
    
    Regrese a mi cubículo e intente concentrarme, aunque no lo logre, los minutos pasaron y justo antes de salir a comer ella volvió bastante acalorada e intentando de acomodarse la falda pues veía que seguía un poco más arriba de ...
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