1. El regalo: Un antes y un después (Novena parte)


    Fecha: 27/12/2021, Categorías: Infidelidad Autor: DestinyWarrior, Fuente: CuentoRelatos

    ... concentrado en la ruta, conduciendo a prudente velocidad detrás de un camión de reparto.
    
    —¡Me dejaste excitada! —Me dijo, recostando su cabeza contra el cristal–. Ya sonaba la siguiente canción, si no recuerdo mal era «Hung Up» de Madonna.
    
    —Lo siento Pao pero no podíamos… —No me refiero a lo de ahora Rocky. Antes ya lo estaba y durante el almuerzo no dejaba de recordarlo. Me sorprendiste, incluso más que a esos dos.
    
    —Humm, discúlpame Pao, solo se me ocurrió de repente. ¡Pero casi ni te toqué! —Y levantó su preciosa cara de muñeca Barbie para decirme algo más serena…
    
    —¡Es que no fue el hecho de que me rozaras! Fue el acto en sí, tu inesperada reacción después del beso que te pedí y además la sensación de que lo hiciéramos delante de alguien más. De mostrarnos antes ellos como una pareja con deseos, disfrutándonos. Y yo quería más, Nene. ¿Tú no? —Tragué saliva y sin dejar de observar la parte posterior del camión, le contesté…
    
    —Pues ahora que lo pienso… ¡Sí! Me gustó. Pero era un escarmiento, para que la Trini te dejara en paz y que Joaquín desistiera de sus intenciones conmigo. —Y recordé aquella escena, la tibieza que sentí rozando la piel suave de su vulva y sobre todo el aroma impregnado en mis dedos, la forma tan erótica de aceptar lamer mis dedos con mi saliva ya en ellos.
    
    —Pero si preciosa… ¡Me causó un gran morbo hacerlo delante de ellos! —Paola se sonrió y guardó silencio por unos minutos.
    
    —Te llamó a mitad del almuerzo. ¿No es verdad Nene? —Me ...
    ... preguntó sin dejar de observar la lejanía.
    
    —Exacto. Era mi esposa. —Le respondí–. Quería saber cómo me encontraba y… supongo que también con quien.
    
    —¿Y le vas a contar? Es decir… ¿Le vas a comentar que estuviste conmigo? —¡Pufff! Suspiré y en mi mente construí la imagen de Silvia, su rostro, su voz diciéndome que me amaba. Sí… «A pesar de todo».
    
    —Pues si lo pregunta sí, no le veo el inconveniente Pao. Estamos trabajando e hicimos un buen negocio. —Le contesté finalmente.
    
    —Tú… ¿La amas mucho no es verdad? —La miré un momento, un instante tan solo…
    
    —¡Rocky!… ¡Cuidadooo! —Me sobresalté por el grito de Paola, el camión que marchaba delante hizo a su izquierda un cambio abrupto de carril, –después de un curva– dejando de repente en mi campo de visión a una mujer que parada casi en frente y a poca distancia, agitaba sus dos brazos desesperada, rogando que me detuviera.
    
    Cambié la marcha de Cuarta a segunda, forzando la desaceleración y pisé con fuerza el pedal. 15 o 20 metros de huella de frenada y esa mujer ni un centímetro se movió. ¿Valiente? No, sencillamente se había paralizado por el pánico. Me bajé con afán para ver cómo se encontraba ella. Paola igualmente descendió y nos acercamos hasta la mujer que estaba lívida, pero respirando de manera agitada, a tan solo escasos dos metros del parachoques de mi Mazda.
    
    —¡Señora pero que carajos le pasa! —Le dijo disgustada Paola a la mujer que apenas si reaccionaba.
    
    —Tranquila Pao… Disculpe señora. ¿Se encuentra ...
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