Mi esposa Sofía: Demasiado hermosa para un solo hombre (3) - Relatos Eróticos

Mi esposa Sofía: Demasiado hermosa para un solo hombre (3)

... tomaban un color rosado. Yo disfrutaba mucho verla con su boca abierta gimiendo y sus mejillas sonrojadas cuando disfrutábamos de sexo en nuestro hogar.

Había planchado su cabello y su maquillaje era ligero, ella no necesitaba maquillarse demasiado solo un poco para mostrar más sus enormes ojos y su piel perfecta.

Decidí bajar y dejarlos allí sabía que no podía pasar más de eso.

Después de unos minutos Sofía bajó muy sensual y detrás de ella su tío.

-mi amor como me veo

La mire aunque ya la había visto a escondidas arriba parecía que ella no hacía más que verse más bella cada segundo.

-Te ves espectacular amor, como siempre.

Salimos a la misa pero en vez de que Sofía se subiera enfrente decidí irse detrás con Benito. Mientras mi suegra subía conmigo enfrente.

Mire por el retrovisor y pude ver como su ligero se mostraba un poco debajo de su vestido. Benito no le quitaba los ojos a sus piernas. Después de todo él la había vestido para él.

Al llegar a la iglesia todos miraban a Sofía podía ser un lugar santo pero hombres son hombres hasta el Padre que conocía a Sofía desde pequeña se la devoraba con la vista.

Juanita la festejada proveniente de la familia de Sofía también era muy guapa al final la sangre en la familia siempre daba con mujeres bellas.

Terminando la misa Benito no se despegaba de Sofía y para todo pedía su ayuda pues decía que había sido un día agitado y su pierna ya no daba para mucho.

Nos dirigimos a donde sería la fiesta ...

... y en nuestra mesa como era de esperarse Benito era uno de los que estaría con Sofía y conmigo. No me sorprendió ver que además de él Rogelio se sentaba con su esposa y dos amigos más de Benito que seguramente eran del club del Tío. Y viendo la oportunidad de estar en la misma mesa que mi esposa aprovecharía para llevarse al menos una buena imagen de su cuerpo.

El único que iba con esposa era Rogelio era obvio que también hubiera deseado ir solo pero pueblo pequeño no tenía otra opción.

Todo ocurrió normal se llevó acabo el vals. Los regalos etc. Y Sofía se paraba muy poco para ir al baño o a recoger alguna cosa que su mamá le pidiera. Así que los hombres estaban pendientes de ella cada que se paraba.

Cuando estaba a punto de empezar el baile un hombre se acercó a Sofía

-Sofía como estas cariño tanto tiempo sin verte. Mírate estas hermosa

-Hola Eduardo que milagro años sin verte

-Si, no pensaba regresar después de la universidad pero llevo ya dos años de regreso aquí al pueblo, ejerzo de doctor en la clínica del pueblo.

-Que bien lograste tu sueño, donde estás sentado?

-No tengo mesa Sofía veré donde me sentare.

-No no busques más siéntate con nosotros. Te presto a mi esposo Jorge.

Estire mi mano para saludarlo.

-Hola Jorge te felicito te llevaste a la mujer más hermosa del pueblo encantado de conocerte.

Me dije por dentro otro más a la lista... y me reí por dentro preguntándome quien habría sido en la vida de mi esposa.

Era una mesa ...