Terapia de pareja
Fecha: 19/06/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... apoyaban en la cintura delgada de Lucía. Ella lo miró, expectante, y el doctor le dio un beso en la boca. Ella se apartó enseguida. Miró a su novio. Tenía los ojos desorbitados por lo que acababa de ver. Su piel estaba roja y parecía molesto y fascinado a la vez.
— Recuerden que cuando quieran abandonar el experimento no tienen más que decírmelo — les recordó el doctor, y cuando terminó de decirlo le comió nuevamente la boca a Lucía. La lengua se metía, hábil entre los labios gruesos de la chica. Lucía apoyó sus manos en los pectorales del doctor, e hizo fuerza en dirección contraria a él, como para zafarse. Sin embargo, su resistencia se hacía cada vez más débil, ya que no escuchaba a su pareja pedir que se termine el experimento.
— ¿Y bien Hernán?, me imagino que eso no se lo esperaba. ¿Cómo se encuentra? Dígame la primera palabra que se le ocurra.
— Superado —dijo Hernán al instante.
— Entiendo, ha de ser una situación sumamente inusual para ambos. Sin embargo, acá estamos. Usted Lucía, a medida que pasaba el tiempo no sólo dejó de resistirse, sino que también masajeó mi lengua con la suya. Y usted Hernán, veo que, aunque se sienta “superado”, su sexo no describiría este momento de una forma tan dramática —agregó, señalando con la mirada la evidente erección del muchacho—. Probablemente piensan que ninguno se los dos actuó porque esperaba a que el otro lo haga. Pero no se engañen, y no se culpen entre ustedes. La decisión es de ambos, en todo momento. Ahora, ...
... ¿qué les parece si continuamos con el experimento? Vamos a seguir avanzando, lentamente, a ver hasta qué punto llegamos.
El doctor agarró de la muñeca a Lucía y la atrajo de nuevo hacía él. Ella se dejó llevar, sin dejar de mirar a su novio, quien se mantenía en silencio, sin perderse detalle de lo que acontecía.
El Doctor acarició a la chica en las caderas, y sus manos subían lentamente, hasta llegar a su blusa, para meterse por debajo de ella y comenzar a masajear las tetas de Lucía.
— Su novia es muy hermosa, Hernán, debería estar sumamente orgulloso de ella.
— Sí —Alcanzó a susurrar el muchacho mientras veía como profanaban el cuerpo de su pareja, mientras que ella sólo guardaba silencio y se entregaba por completo al experimento.
Luego el doctor le quitó la blusa, y la hizo girar, de manera que lucía quedó de espaldas a su novio.
— Veo que está mirando todo con detalle. Muy bien Hernán. Continúe así por favor. Ahora quiero que mire cómo despojo de su lindo pantalón a Lucía. —Desabotonó la prenda y la bajó lentamente—. Lucía, tiene un cuerpo encantador, la felicito —dijo. Y luego, mirando a Hernán, agregó—. Ahora Hernán, usted va a presenciar como poseo a su novia ¿Está de acuerdo con eso? —Hernán no podía articular palabra. Lucía había quedado sólo con su ropa interior negra, y el doctor tenía las manos en sus caderas, y su sexo, que se notaba erecto dentro del pantalón, estaba muy cerca de las nalgas de la chica. Lucía, a su vez, parecía totalmente ...