Políticamente incorrecto
Fecha: 05/07/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Gargola, Fuente: CuentoRelatos
... lado.
Raúl se deshace de los pantalones apresuradamente. Isabel se relame esperando el premio y él se muestra desnudo exhibiendo una erecta verga adornando su esculpido cuerpo. No es, ni de lejos, como la su otro amante, pero es el conjunto de sus cualidades lo que le cautiva. El chaval se pone encima de ella y ambos restriegan sus cuerpos desnudos. Las manos de Raúl colisionan con las de Isabel en su ruta de exploración por ambas fisionomías. Las manos de Isabel aferran su culo y piensa que es pura poesía. Aquella mujer de cultura portentosa está atribuyéndole calificativos artísticos a un culo, pero qué culo, piensa. Igualmente, el joven atleta experimenta la satisfacción de acariciar las aterciopeladas nalgas de la política, reconociendo el privilegio de retozar con ella.
El muchacho la besa, explora su boca y luego sigue su camino hacia el lóbulo de la oreja, desciende por el cuello, entretanto, su mano acaricia su estómago y circunvala el monte de venus para deslizarse por la pierna. Su lengua repasa sus pezones, luego se descuelga por su barriga dando repetidas vueltas por el ombligo buscando la humedad de sus pliegues y ella ahoga la respiración cuando la lengua encuentra la guarida. Él le aparta las piernas y degusta por vez primera su sal penetrante. Huele, lame y se embelesa con la ambrosía de aquella diosa. Las manos de Isabel cogen su cabeza y la aproxima hacia ella, buscando con los movimientos de pelvis, su lengua. El muchacho se aplica en la tarea de ...
... devorar la gustosa almeja, a la vez que soba los turgentes pechos. A continuación, baja la mano por la planicie de su abdomen, acariciando cada resquicio de su tersa y suave piel. Isabel se incorpora y tumba a su joven amante en la cama, ensamblando el sexo en su boca, del mismo modo, se pone a la altura de su miembro para engullirlo, acoplándose en un perfecto sesenta y nueve. Sus flujos resbalaban directamente en la boca de Raúl, y su miembro desaparece en la de Isabel, deleitándose y excitándose cada vez más hasta que abraza el anhelante momento en el que el joven apolíneo la penetre. Piensa que puede estar ovulando y le pregunta si tiene condones, pero es evidente que obtiene una respuesta negativa, aunque ella está demasiado excitada para ser sensata, de hecho, hace ya unos meses que la sensatez ha desaparecido de su vida, a pesar de ser un personaje público de relativa notoriedad. Pese a todo, le pide que no eyacule en su interior. Coge el miembro y se lo introduce, de tal manera que le muestra sus nalgas mientras salta sobre él a la vez que contempla sus nalgas perfectas en forma de corazón y se aferra a ellas. Le faltan manos para magreárselas. Simultáneamente le dedicaba las palabras más complacientes que pueda escuchar acerca de su trasero. Después de un rato saltando encima del joven potro, Isabel se da la vuelta y vuelve a acoplarse recorriendo su torso con las manos al mismo tiempo que vuelve a brincar sobre el joven que la está llevando al inminente clímax. Raúl se ...