Lucía (Cap. II): Lucía estaba en sus días
Fecha: 20/07/2022,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: Manuman, Fuente: CuentoRelatos
... eléctricas mientras miraba mi reacción. En mi desesperación, pasé de la violencia al sometimiento, hasta que patéticamente le supliqué al vigilante porque me entregara el video, o que lo borrara. –Piensa en Lucía- Le pedí -Esto hará mierda su reputación y su carrera. ¿Cómo puedes ser tan culero?
Pero él parecía disfrutar mucho con mis ruegos y no cedió la más mínima parte. –Ya sabes, mañana me dices lo que vamos a hacer, Manolo. Depende de ti. Solo convence a Lucy de hacer lo que pido- Dijo al final, forzándome discretamente a salir del edificio. –Yo nada más quiero ayudar. Así que ¿por qué no me ayudas tú también?
Finalmente salí del edificio. Avancé cabizbajo las dos cuadras que había hasta llegar a donde Lucía había dejado su coche. Pude ver a lo lejos que ella estaba recargada en la puerta del conductor, atendiendo la pantalla de su celular. Me dirigió una sonrisa muy dulce cuando me vio caminando hacia ella y yo me maldije por ser un pendejo y maldije a Filemón por ser tan hijo de perra. Todo parecía desmoronarse delante de mí, justo cuando había conseguido llevarme a la cama a la espectacular Lucía, pero lo que más me dolía era sin duda, saber que había perdido mi única oportunidad de tener algo más con ella y todo por culpa de Filemón y su enfermiza necedad de cogerse a Lucía.
-¿Por qué esa carita?- Me preguntó Lucía, dejándome las llaves de su coche.
-No es nada- Le mentí, inventando luego cualquier pendejada para justificar mi semblante ...
... preocupado.
-Tal vez estás de mal humor porque tienes hambre ¿Cenamos juntos?- Propuso Lucía, antes de entrar al coche por el lado del acompañante.
-¿A dónde te gustaría ir?- Le pregunté, dando un resoplido para intentar calmarme, mientras daba marcha al auto.
-Es viernes y mi ex pasará por Mary a las 10. Se la lleva a pasear casi todos los fines de semana- Dijo Lucía, refiriéndose a su hija adolescente, a quien había visto casualmente aquella misma mañana, que ahora parecía tan lejana. –Así que si no te importa, podemos cenar en mi casa. Pedimos pizza o algo y así me haces esa pregunta tan importante- Me dijo, con un dejo de infantil emoción. –A menos que quieras preguntarme ahora mismo. Sólo tienes que animarte.
Tuve la certeza de que Lucía necesitaba de alguien que le diera afecto, antes que cualquier otra cosa. Necesitaba de un hombre que fuera más allá de la obvia atracción que a cualquiera le despertaba con su notable belleza. Comprendí que gracias a que yo jamás tuve el valor para intentar ligármela, ni aun cuando nos hicimos buenos amigos, fue que Lucía terminó eligiéndome para poder mostrarse en toda su fragilidad. Creo que nunca agradecí tanto mi poca habilidad con las mujeres. Y si para disfrutar de Lucía, debía de hacer a un lado el miedo ridículo de comenzar una relación tras mi divorcio, estaba más que feliz de hacerlo, así que se lo propuse en ese mismo momento.
-Por supuesto que quiero- Respondió, lanzándose a abrazarse de mi cuello y luego de darme un tierno ...