Cena de aniversario
Fecha: 12/08/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: ElenaRmz, Fuente: CuentoRelatos
... mí.
Lázaro se estaba poniendo visiblemente ansioso de que su ausencia del comedor probablemente se volviera más notoria a medida que se acercaban los veinte minutos. Limpiando los últimos rastros de eyaculación de debajo de mi mandíbula, asentí con la cabeza y sonreí cortésmente en señal de aceptación mientras arrojaba el trapo sucio en la canasta. Caminó hacia la puerta, la abrió y rápidamente escaneó el área antes de acompañarme de regreso al restaurante.
Lázaro, sabiamente, se metió en la cocina para esperar nuestra partida. Mi Rey todavía atormentaba en voz alta al gerente y al anfitrión cuando llegué.
MR: ... ¡y no sé si alguna vez he experimentado una actuación tan vil y vergonzosa por parte de todo un establecimiento!
Habiendo agotado los hechos relacionados con el incidente, mi Rey, había recurrido a amplios ataques emocionales contra el restaurante en su conjunto para alimentar su ego. Miró para registrar mi llegada a la mesa, mientras agarraba mi bolso del asiento. Sus ojos se posaron en la mancha lechosa de semen untado en el estómago de mi vestido. Señalando la mancha sucia, su perorata cambió de rumbo.
MR: ¿¡Y qué hay de mi esposa, mi princesa!? ¡Su vestido se arruinó por este lío!
Me sonrojé ...
... levemente mientras abría y cerraba mi bolso, luego caminé alrededor de la mesa, evitando los ojos abiertos de los caballeros mientras viajaban desde la mancha en mi vestido hasta mi cara enrojecida.
MR: ¡No volveremos a este pinche changarro! -Concluyó su discurso
Y: Rey, vámonos. -Le di una palmada en el hombro mientras comenzaba a caminar hacia la salida.
MR: Mientras lanzaba su salva de despedida, ¡Será mejor que mi coche me esté esperando en el frente!
Caminando detrás de mi marido, miré por encima del hombro para ver a Lázaro emergiendo de las puertas de la cocina. Al otro lado del comedor, luego sacó un pedazo de seda negro del bolsillo del pecho, culminando con un hondo respiro al mismo y una inmensa sonrisa de satisfacción.
Subimos al coche mientras mi Rey repetía en voz alta al valet.
MR ¡Pinche changarro de mierda, Nunca volveremos a venir aquí!
Deslizando mi trasero por el asiento, sintiendo el calor de las vestiduras contra mi piel desnuda.
Y: Tu quizás no, pero yo definitivamente sí. -en voz alta:
Epilogo:
1.- A las pocas semanas decidimos separarnos y después de un tiempo nos divorciamos.
2.- Ya separada, pero aún no divorciada volví para un 2 x 1, con Lázaro y Raúl, pero esa es otra historia.