1. Cosas del azar


    Fecha: 09/12/2022, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... vi la primera vez, conseguiste atraparme para decirte lo contrario... que sí a todo, porque me encantó sentir tu boca, tus besos, sentir tu leche caliente en mi garganta por primera vez lo mismo que una polla en mi culo y que esa fuera la tuya... ¡La mejor polla que he visto en mi vida!
    
    Me mirabas y yo te sonreía agarrando dulcemente tu barbilla observando como tus ojos se iban llenando de lágrimas.
    
    - Silvia, no es tu culpa... si no de la apuesta. - dije al fin sin dejar de mirarte fijamente.
    
    Volví a mirar a Pablo sin entender nada, tu mano seguía acariciando mi cara y me diste un beso sin entender nada de lo que estaba pasando.
    
    - ¿Qué es todo esto? - pregunté mirando a ambos alternadamente buscando una explicación.
    
    - ¡Pues eso, joder!, ¡que perdí la apuesta! – dijo Pablo al fin abatido.
    
    - Pero a ver... ¿Qué coño de apuesta? - pregunté mosqueada.
    
    Te miré de nuevo y fuiste tú el que lo contó todo dejándome petrificada.
    
    - Muy sencillo, verás... En todos estos años tu maridito nunca dejó de hablarme de ti... siempre que nos veíamos nos contábamos todo, no había un día en el que no salías tú en la conversación, llegué a aprenderme todos tus gustos, manías. Sí, Silvia... Pablo me contó todo de ti, lo que te gustaba y lo que no te gustaba hacer con él en la cama, me relató todo en este tiempo y me enseñó las fotos de tus tetas y alguna otra desnuda que te robó a escondidas, hasta que pactamos encontrarnos en el cine de forma aparentemente casual.
    
    - ¿Es ...
    ... verdad eso, Pablo? - pregunté a mi esposo confundida sin creer semejante cosa y luego seguí mirándote para oírte continuar.
    
    - Después de alguna cerveza en alguna de nuestras quedadas, Pablo me confesó que nunca habías querido tragarte sus corridas y que nunca le permitiste follarte el culo. Él no me creyó cuando dije que, si me dejara a mí, yo conseguiría eso de ti, que podrías ser la mayor puta entregada a mi polla en tu coño, en tu boca y en tu culo y las veces que quisiera. Que me vaciarías los huevos y tragarías mi leche con devoción, que te convertiría en otra Silvia desconocida. Él se reía de mí... nunca me creyó y ahora ha perdido la apuesta, ¿no crees?
    
    Miré una vez más a Pablo sin creerme lo que oída de tu boca. Y esta vez fue él, quien, arrepentido, confesaba:
    
    - La cosa se nos ha ido de las manos, cariño. Lo siento, nunca pensé que David lo conseguiría y ahora, no solo te ha follado como ha querido, las veces que le ha dado la gana, te ha petado el culo que yo nunca probé, Te has tragado su leche, la que nunca quisiste tragarte de mí... y para colmo, la broma, además... me ha costado perder la apuesta y pagar un alto precio.
    
    - ¿Qué precio? - pregunté asustada.
    
    - Que vendrá a follarte cada fin de semana durante todo lo que queda de año y yo me quedaré mirando.
    
    Quise gritar, quise pegarles a ambos, pero mi coño me traicionaba y empezaba a palpitar mojando mis braguitas con la idea de follar cada fin de semana contigo. Me tienes loca y eso que eres un ...