1. Siento curiosidad


    Fecha: 13/12/2022, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: femerba, Fuente: CuentoRelatos

    ... allí.
    
    Terminado el espectáculo y bastante excitados con lo visto, salimos a caminar y, en nuestro recorrido, probamos entrar a diferentes sitios, simplemente para observar cómo se daba aquello. Así que entrábamos a los bares, pedíamos una cerveza, nos quedábamos un rato, y luego acudíamos a otro lugar. En aquellos lugares, generalmente, las dependientes atienden a la clientela en “Top less”, lo cual ciertamente era un espectáculo para mí, aunque creo que mi esposa también lo disfrutaba. En otros lugares había shows de sexo en vivo, menos elaborados que lo visto en los teatros, pero todo alrededor del intercambio sexual.
    
    Para nosotros, jóvenes, con poco tiempo de casados y sin hijos, aquello era toda una novedad y una invitación a la exploración. Mi esposa, un poco desinhibida, comentó que le causaba curiosidad cómo Dalila podía recibir el miembro de Sansón de la manera que lo habíamos visto y se preguntaba si aquello no le produciría ningún dolor. Pues, por lo visto, yo diría que no, apuntaba. ¿Por qué lo preguntas? Simple curiosidad, respondía. También me comentó que aquello era algo hecho para hombres, porque lo que más veíamos en los shows eran mujeres. Bueno, decía yo, seguramente hay hombres que ofrecen esos servicios, pero, me pregunto, ¿acaso será igual el número de mujeres al de hombres que demandan ese servicio? Tocaría preguntar, decía yo.
    
    Esa noche nos cansamos de caminar, entrar aquí y allá, visitar tiendas de artículos para sexo y otros artículos. ...
    ... Incluso entramos a un cine para ver qué tipo de películas presentaban. En una de estas tiendas, observando la amplia oferta disponible de consoladores, me atreví a comentar, si estás interesada, te puedo comprar uno. Pero eso es artificial, contestó ella, yo preferiría que fuera natural. ¿De verdad? ¿En serio? ¿Serías capaz? Pregunté. No sé, siento curiosidad. Y, a través de los años, aprendí que cuando ella dice “siento curiosidad” es que está experimentando mayúscula calentura. Pero en aquella ocasión su comentario, lejos de parecerme inadecuado, sirvió de excitador. Bueno, si ella se da la oportunidad, por qué no yo también, pensé.
    
    Llegamos muy de madrugada al hotel, pero andábamos tan excitados con el ambiente, que no teníamos muchas ganas de dormir y sí de hacer algo más. Sin embargo, como no teníamos claro qué hacer ni a dónde ir, nos detuvimos en el bar del hotel, pedimos lo habitual allí, cerveza, y seguimos conversando sobre lo acontecido aquella noche. Bueno, pero con la verdad, increpé a mi esposa, ¿te gustó Sansón? Me encantó dijo. El tipo es espectacular. Y, si él te invitara a subir al escenario, como lo hizo con aquella señora, te le medirías. Pues, en público, no me atrevería. O sea, en privado, sí. ¿Por qué no? Contestó.
    
    Bueno, pero concretemos, dije. ¿Cuál es tu aventura? ¿Qué es lo que quieres experimentar? Es que yo nunca he estado con un tipo de esos, respondió. Por eso te pregunto. ¿Qué sería, entonces, lo que quieres probar? Pues, si soy capaz de ...
«1234...11»