El regalo: Un antes y un después (Undécima parte)
Fecha: 14/01/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: DestinyWarrior, Fuente: CuentoRelatos
... de mis hijos lo voy a hacer. Y tú… ¿Cómo va todo con tu esposo?...
Levanté mi vista del teclado del móvil para observar como Rodrigo bebía un sorbo de su cerveza, muy atento a lo que escribía yo en el mío. Si Rodrigo quería jugar conmigo, yo también podría lanzar mis dardos.
—Don Hugo, la verdad me cansa mucho escribir, porque mejor no… ¿Puede hablar? O… ¿Está su esposa por ahí cerca? —Doble check.
—Escribiendo…
—No hay problema Silvia, después de dejar mi maleta lista, salí a correr un rato al parque y ahora estoy descansando frente a la entrada. Y tú… ¿Puedes hablar con tranquilidad?
Y totalmente decidida, me senté en el sofá, recompuse un poco mi cabello para posteriormente, dar un toque al símbolo de video llamada y esperé.
…
Silvia se escribía mensajes con alguien. Alguna compañera de trabajo o de pronto su amiga Mónica, quien desde Colombia, le comentaba cómo iba el tema de su reciente embarazo. Pero al observarla, noté que su enfado inicial cambió al leer uno de los mensajes y en sus ojos un brillo; en su boca se dibujó una satisfactoria sonrisa y luego se acomodó en el sofá de la sala, cruzando sus piernas y acomodando un cojín por detrás de su espalda, luego el otro en medio de sus muslos. Presentí que llegaba el momento de su venganza. Y por qué no, la mía también.
Fue la primera vez que escuché aquella voz. Grave, en una tonalidad algo baja, saludaba a mi esposa con algo de sorpresa. En él primero, enseguida en mí. Un… ¡Hola Jefe! ¿Cómo está ...
... usted? De mi esposa y por respuesta escuché de aquella voz masculina un… ¡Muy bien! Pero tú te ves mejor. Y Silvia sonrió.
Ese… ¡Te ves! disparó en mi las alarmas. ¡Estaban con seguridad en una video llamada! Mi esposa usando mi camiseta de hacer deporte por pijama que le quedaba por fortuna holgada, aunque dejaba transparentar un poco sus aureolas. Yo analizaba esa noche la postura, los gestos y las expresiones, colocando especial cuidado en el tono de la voz, tanto de aquel hombre como de mi esposa. Pero el sonido de un nuevo mensaje entrante, me hizo desviar la mirada y concentrarme en la explicación pendiente con mi rubia tentación.
—Rocky, Nene, perdóname por escribirte tan tarde. ¿Te molesto?
—Escribiendo…
—¿No estarás enojado conmigo? ¿O sí?
—Escribiendo…
—¿Rocky? Y ajá Nene, no me vas a responder. ¡No pongas en Ohio con yo! Carita triste y otra carita llorando.
—Escribiendo…
—Me muro si es así… ¡Plop! Me murí. Carita de muerta.
—Buenas noches señorita mimada pero incumplida. ¡Jajaja! Me hacen gracia tus emojis. Así quien se puede «enohiar» contigo. —Doble check.
—Escribiendo…
—Anda Nene, es que no me escribías nada. ¿Estás muy ocupado?
—No señorita Torres, solo que acabo de hablar con mi esposa y pues… —Doble check.
—Escribiendo…
—¿Y ajá? ¡Cuenta, cuenta!
—Ahora no Pao, tal vez mañana. Mejor concentrémonos en lo que necesitas aprender para mañana. ¿Papel y lápiz, en la mano? —Doble check.
—Escribiendo…
—¡Erdaaa Nene! ...