El regalo: Un antes y un después (Decimotercera parte)
Fecha: 17/01/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: DestinyWarrior, Fuente: CuentoRelatos
... las cifras son iguales, aquí, allá o en la china. —De nuevo aquel apelativo que me gustaba, sí, pero que no debía ser.
—Ahora que lo mencionas, me parece recordar que en tu currículo, colocaste que habías sido modelo en Colombia. Debes saber elegir y combinar bien tu vestuario. ¿Por qué no me dejas ayudarte a escoger tu ropa? Y así de paso, me enseñas los vestidos que compraste aquel día. —Me quedé sin habla.
¡Mierda! Bendita la hora en que se me ocurrió escribir aquello en mi hoja de vida. Lo hice para impresionar, llamar un poco la atención. Pero aquella noche, ese tiro me había salido por la culata.
—¡Como se le ocurre jefe! Le respondí. —¿Me está pidiendo modelarle los vestidos? Mi esposo está en nuestra habitación. ¿Qué cree usted que él se va a imaginar? ¡Ni loca! Mejor le pediré ayuda a mi madre o a Magdalena, ella tiene buen gusto y me podrá ayudar con eso.
—Vamos Silvia, no te pido que te muestres nuevamente desnuda para mí, solo deseo ayudarte y además quiero verte lucir esa ropa. Debes verte preciosa…
—Lo siento jefe, mi esposo me llama. —Lo interrumpí para finalizar la llamada abruptamente y no tener que darle más explicaciones–. Ese hombre no parecía cambiar sus intenciones hacia mí.
Me dirigí hasta mi alcoba, donde Rodrigo descansaba mirando una serie en el televisor.
—¿Y bien? ¿Qué quería el señor? ¿Se siente solito y desamparado? ¿Se le salió el chupete de la boca al bebé? —Me dijo mi marido, en el momento en que me retiraba la bata para ...
... dejarla de nuevo colgada en la percha de la puerta de nuestro baño y salía con mis tetas al aire, para acurrucarme a su lado.
—No mi amor, pero sirvió para sacarme de la duda sobre el viaje. No te vayas a enojar, por favor. —Rodrigo se acomodó mejor, pasando su brazo izquierdo por debajo de mi cabeza.
—Haber al mal paso darle prisa mi amor. Me muero de las ganas por saber cómo será la siguiente jugada de tu jefecito.
—Pues mi vida, nos iremos el jueves a primera hora, trabajaremos todo el dia recopilando datos, revisando la información de las empresas del grupo. El viernes será la inauguración y el sábado ya estaré de regreso.
—¡Dos noches Silvia! Dos noches tú a su alcance. No lo sé, en serio. Y no es por ti, te aclaro. Es por él y sus reales intenciones. No lo entiendo, con semejante mujer tan hermosa que tiene en su hogar y él buscando que merendar en casa ajena. —Ese comentario aunque valedero, no me supo bien.
—Ya te dije que no voy a dejar que suceda nada. Lo tengo muy claro, grabado aquí, y le señalé mi frente. —¡Óyeme! ¿Y cómo sabes tú que su esposa es hermosa? ¿La conoces? ¿La has visto? —Me senté para mirar el rostro de mi esposo y escuchar con atención su respuesta–. Lo noté nervioso, y rascándose la barbilla me contestó.
—No obviamente, como se te ocurre. Pero recuerdo tus palabras, tú me lo comentaste tras ver ese video teniendo sexo con su amante. —Me respondió con mucha seguridad, despejando mis dudas.
—Y que más te dijo Silvia, hablaron ...