El regalo: Un antes y un después (Vigésima segunda parte)
Fecha: 08/03/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: DestinyWarrior, Fuente: CuentoRelatos
... sonrisa y nos indica que estamos listos para aterrizar. Organizamos todo de nuevo y pensé en como «vuela el tiempo», cuándo la mente se ocupa. Y de nuevo ajusté mi cuerpo contra el mullido sillón con el cinturón y de regreso yo, a mi temido suplicio. Me encomendé a Dios y a la Virgen, por supuesto también miré a don Hugo y con honesta necesidad, le pedí que estrechara mi mano con fuerza. El de manera cariñosa y atenta, la acarició y aprovechó de paso para darme un beso paternal en mi frente. Vibraciones, movimientos bruscos. ¡Agacho mi cabeza! Un golpe seco que se escucha y aprieto con mayor fuerza la mano que me auxilia y mis piernas, rodilla contra rodilla, aguantando mis repentinas ganas de orinar. Otro golpe después y en un instante todo cesó. ¡Turín, estoy aquí por fin! Me hablé a mí misma, agradecida por estar de nuevo en tierra. Y mi jefe… ¡Feliz! Sin privarme de su tibieza, no retiró ni un segundo, mi mano de la suya hasta que finalmente se detuvo aquel «Unicornio Volador».
Recorrimos sin premura, los amplios pasillos del aeropuerto, maravillada yo de tanta tranquilidad pues a esas tempranas horas, no ese encontraba muy concurrido. Una mujer de cabello negro y muy lacio, joven y elegante, agitaba un cartel con el nombre de mi jefe y sus apellidos en el hall de llegadas. Miraba en varias direcciones hasta que por sorpresa don Hugo a su costado, la saludó en un correcto italiano.
La joven italiana después de asimilar su sobresalto, sonriente le estrechó la mano ...
... y se presentó hablando en un esmerado español, aunque con algo de acento al final que se me antojo muy dulce y tierno.
—Buenos días señor Bárcenas y Esguerra. ¿Señoraaa?… —Silvia, preciosa. ¡Simplemente Silvia! Me apresuré a presentarme.
Le di un rápido vistazo a la bella joven. Rostro ovalado, primorosamente maquillada, ojos avellanas preciosos y vivaces, cejas perfectamente delineadas y ligeramente arqueadas. Rectilínea y perfilada su nariz y boca no muy grande, con labios gruesos y brillantes por el carmín de su pintalabios. Sus dientes perlados y bien alineados, los exhibía abiertamente con su juvenil sonrisa. Varios centímetros más alta que yo, destacaba en su mano derecha un tatuaje de una colorida rosa, con gotitas rojas alrededor y un brazalete dorado, ancho y forjado. Falda de un solo tono azul petróleo de polyester y acampanada hasta una cuarta por encima de sus rodillas, con elástico en la cintura.
La blusa blanca con delgadas franjas transversales rojas que permitían al buen observador, detectar por debajo de aquella suave tela, el estilo de su delicado brassier de encaje, sin privarle para nada de la libertad de movimiento de unos senos de mediana talla y un blazer rojo tipo sastre con solapas, bolsillos verticales y por cierre un solo botón. Unos preciosos botines de piel negros con cremallera al lado, lustrosos tanto que, al contraste de la luz artificial, mostraba visos rojos y naranjas en las formas geométricas de la imitación de piel de cocodrilo. ...