1. En casa de mi jefe: Cuarta parte donde cumplo mis deseos


    Fecha: 10/08/2023, Categorías: Dominación / BDSM Autor: hotmind, Fuente: CuentoRelatos

    ... pene entre ellas. Si no hacía algo, no iba a suceder. Con una mano en cada nalga, abrí mi culo.
    
    —Méteme lengua.
    
    —Pero…
    
    —Ughh lo limpie Braulio. Tu solo hazlo!
    
    El reacciono y se puso entre mis cachetes, tímidamente puso su lengua en mi ano y comenzó a moverla.
    
    —Eso, así rico.
    
    Sus manos ahora hacían apertura y comenzaba a sentir su respiración en mi culo. Su lengua era muy adecuada para el trabajo.
    
    —Mmmm lo haces muy bien. Eso métela.
    
    Ya no solo lamia sino liberaba su lengua en mi ano, entraba y salía lubricando la entrada.
    
    —Sii. Sii, lo haces divino. Escúpelo.
    
    Lo hacía muy bien la verdad, su lengua era su herramienta y la usaba bien. Me escupió el agujero y ponía la baba hacia dentro.
    
    —Ahora métela. La tienes tiesa…?
    
    Y sí que la tenía dura, la sentí entrar torpemente, pero no me quejé. Es más lo incité.
    
    —Sii. Eso, eso. Métemela por el culo. Métela.
    
    Él era brusco en el meter y dolía. Se salía y la metía con fuerza. Debía mantenerla dentro con mucho aplomo, doblegando mis generosas nalgas.
    
    —Métemela, que no se salga. Fuerte nomas.
    
    Yo estaba más que salida y excitada, no pensaba en lo que decía... en esas me hace caso y comienza a culearme con ritmo y fuerza, me azota contra el escritorio.
    
    —Me gusta. Siii. Dame, dame más!
    
    Sentía muy rico su cogida y cada vez sentía más placer. Estaba arrimada al escritorio apretando unos papeles con mis manos, con las piernas abiertas y con Braulio dándome por el culo. Estuvo unos minutos y se ...
    ... estaba cansando.
    
    —Dale Braulio. Dale. No pares.
    
    Aquel escritorio comenzaba a soltarse y a rechinar sus maderas.
    
    —Eso Braulio, lo haces bien… ahg. ay ay ay! Nalguéame.
    
    Y los nalgasos ayudaron a que retomara el ritmo. Eran fuertes y ruidosos, me dolían y excitaban.
    
    —Ya me vengo!!!
    
    —Sii. Dame tu leche, dámela.
    
    —Donde!!... aah agh.
    
    Se estaba quejando y la sacó soltando su leche en mis nalgas y espalda. Estaba caliente y escurría en mí.
    
    Cansado tomó asiento en la poltrona y yo jadeando me quedé tal cual en el escritorio. Solté aquellos papeles que tenía en las manos y me despegaba de la madera, mi sudor estaba encima y caminé al baño en su habitación donde me limpié y duché otra vez. En la ducha sentía el dolor de los manotazos en mis nalgas y pensaba la última vez que alguien me cogió así y en que Braulio también podía. Luego me reía de Raquel y lo que tenía que soportar, aun así sabía que no era suficiente para que tomara la decisión de irse.
    
    Me gustaba la idea de seguir aquí e introducir a Braulio en estas nuevas Prácticas. Al secar mi cuerpo y cabello, pensaba en que no tenía ropa que ponerme, por lo que salí así desnuda y tomé la pastilla anti concepción. Me acosté para dormir y al rato llega Braulio al baño donde se duchó. Saliendo con un nuevo pijama y acostándose junto a mí…
    
    Entre algunos arrumacos dormimos hasta mediodía. Consiguió para mi una remera blanca y un pantalón de deportes azul. Que me quedaban muy ajustados, nos preparamos algo ...