1. El vecino de la embarazada madura


    Fecha: 14/09/2023, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... estuviera interesado en una mujer embarazada de treinta y cuatro años con una gran barriga.
    
    Y Darren me sorprendió acceder tan fácilmente a que yo me pusiera en manos de un joven inexperto que disfrutaría haciéndome un masaje corporal… Tampoco tenía claro si había un significado oculto en su comentario sobre dejarme hacer el masaje, pero yo estaba feliz por su buena actitud al respecto.
    
    Darren siempre quiere que me vista de manera provocativa para él y le gusta que otros hombres me miren mucho... Yo no tenía ningún plan de intentar algo con Peter, pero sólo el hecho de recibir un masaje íntimo me ponía muy caliente.
    
    Debo admitir que soy muy guapa, y antes de quedar embarazada medía 175 cm de alta y pesaba 65 kilos, con buenas tetas y un culo redondo y completo.
    
    Mis ojos de color verde jade también contrastan bien con mi pelo castaño corto... Y ahora, a los siete meses de embarazo, y amamantando a nuestra hija, tanto mis tetas como mi culoo están un poco más llenos... Mi barriga también es muy grande, y he ganado algunos kilos, como es natural... Pero pensé que todavía me veía bastante bien para mi edad y condición, y que mis curvas son sexys.
    
    Al día siguiente dio la casualidad de que tenía tiempo disponible para darme su primer masaje… Me dijo que traería su mesa de masaje y yo pensé que el mejor lugar para colocar esta mesa sería en nuestro dormitorio, donde hay un gran espacio entre la cama y las puertas corredizas, con espejos del armario… Y también, un ...
    ... fácil acceso al baño para que Peter pueda coger agua tibia del lavabo.
    
    Durante mi conversación telefónica con Peter, éste me explicó:
    
    - “Para evitar ejercer demasiada presión sobre el feto, lo mejor es que la madre no sea masajeada boca abajo o en decúbito supino... La posición apropiada para un masaje prenatal es acostada del lado izquierdo con almohadas en varias sitios para apoyo."
    
    Acababa de terminar de amamantar a mi hija y de acostarla para la siesta cuando Peter llegó y puso su mesa de masaje en el dormitorio… Llevaba una camiseta ajustada y pantalones cortos blancos ajustados, que mostraban su cuerpo musculoso.
    
    Esa posición de costado en la mesa la estaba empezando a ponerla un poco nerviosa porque pensó que Peter la vería casi desnuda.
    
    "Peter, ¿qué ropa quieres que me ponga para el masaje?... ¿Me pongo el sujetador y las bragas o qué?, le pregunté.
    
    - "Bueno, Sra. Emma, será más fácil para mí darle el mejor masaje posible si no lleva ropa… Podemos cubrir esas áreas con toallas para preservar su intimidad… Con eso podré tener acceso total para darle el masaje", le dijo sonriendo.
    
    Me dio la espalda mientras me quitaba la ropa interior, me acostaba de lado sobre la mesa y me cubría los pechos y la parte media con unas toallas de color azul claro... Estaba frente al espejo y Peter me colocó algunas almohadas para apoyo.
    
    Me sintí extraña de estar casi totalmente desnuda frente a mi joven vecino al que conocía desde que era un niño pequeño, pero mi coño ...
«1234...11»