LAS PAMPAS CHATAS 2
Fecha: 14/02/2022,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... buenísima, mamita!» «¡Mi bebé es cariñoso con la mamita! ¡Jajaja!» «¿Te parece? ¿Sos mi mamita?» «Claro. Soy más vieja. ¡Jajaja! Sos mi bebe…» «¡Jajaja! ¡Vení mamita que te chupo toda!» «¡Incestuoso! ¿Y qué me vas a chupar?» «Y…, empiezo por los pezones…» «¿Y yo que pezón chupo?» La pícara me la dejó picando. Nada más que verla y el choto lo tenía durísimo. «Bueno, mirá.» Me agarré la pija y la sacudi frente a ella. «Tenés este pezón. ¡Todo para vos!» «¡Cochino! ¡Degeneradito! ¡Jajaja!» Y se tiró sobre mí… Me acostó y comenzó a mamar. Como ya la tenía al palo no demoró demasiado. Se la ensartó y empezó a cabalgar. Era maravilloso ver como saltaban las tetas. Ella se dio cuenta como ya las miraba arrobado. «¡Agarrámelas un poquito, papi, sino se me van a caer! ¡Jajaja! ¡No te olvidés! ¡Tenés que sacármela antes de eyacular!» «Claro por supuesto. ¡Pero vos podés acabar todo lo que quieras!» «¡Sin la menor duda! ¡Te voy a chorrear toda!» «¿Y qué hago con lo que tengo en los testículos?» «Me lo trago todo. Ahora estoy preparada. No me vas a sorprender como esta mañana. ¡Jajaja!» Sin duda a Marilí le encantaba, como a mí, estas guarradas en el lenguaje. Y asi fue. Una maravillosa eyaculación en su boca, esta vez sin nada de desperdicio, luego de tres hermosos orgasmos durante la montada… Pero no me iba a perder algo que me apasiona. Ella lo sabía. Luego de tragar mi semen, se acomodó sobre mi cara. Se refregaba con mi lengua dentro de la vulva. Cuando empezó a temblar, la tomé ...
... de las caderas y apreté el erecto clítoris con mis labios… y tiré fuerte. El orgasmo fue total. Hasta los ojos me taparon sus fluidos… «¡Jajaja! ¡Te gané! ¡Acabé más que vos! ¡Jajaja!» Se levantó y fue a buscar un bidonsito que había traído para las “emergencias”. Nos lavamos caras, piernas, concha y pija. Nos vestimos y nos pusimos a comer los sandwiches de milanesa que había preparado. El jugo de naranja bien fresquito, terminó de despabilarnos. Guardamos todo. Ella no quería que yo la ayudara, pero hice todo lo posible para que su tarea sea lo menos trabajosa. Luego de semejante cogida supuse que ella estaría tan cansada como yo. Y a trabajar. Al finalizar el dia, el segundo dia, ya casi teníamos la mitad hecha y eso que el primer día yo no hice casi nada. Marilí era imprensindible, ¡una campeona! Tendría que darle la mitad de lo que a mi me pagaran. ¡Eso! Cuando regrese le compraré algún regalo y se lo mandaré. ¡Claro que si!
“Regresamos al caer el sol. Mientras yo ordenaba toda la papelería, planos y números, Marilí fue a bañarse. Cuando volvió fui yo, y ella se puso a preparar la cena. Antes de sentarnos a la mesa Marilí sonrió y me dio un besito en el cabello. «Papito…, me limpié bien para vos.» «¿Querés que vayamos?» «Claro. Juguemos un poquito antes de la cena.» Yo me había puesto un short. Ella tenía un muy livianito vestido. Fuimos al dormitorio. Me había descubierto el choto por sobre el pantalón, y me llevaba agarrándome del tronco. Nos paramos frente la cama. ...