1. 52.3 En camino para casa


    Fecha: 30/07/2018, Categorías: Grandes Series, Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos

    ... demasiado mi amor. –me volvía loco con sus besos y el roce de su polla contra mi barriga.
    
    Tenía mi culo dispuesto para recibirlo y podía meter mis dedos fácilmente, lo que me permitían sus piernas entre las mías, mi deseo era tremendo.
    
    -Elévate, quiero tocarte la verga con las manos. –lo hizo y retraje la piel de su prepucio para dejar su glande libre y jugar con él con mis dedos, aunque lo que deseaba era tenerlo en la boca.
    
    Se deslizó hacia abajo y sin dejar de mirarme con vicio satánico en sus ojos.
    
    -Métetela tú mismo, fóllate ya que la deseas tanto y eres tan puto, llévala hasta dentro de ti mariconcito. –utilizaba estos términos tan vulgares que no me molestaban, más bien me excitaban más de lo que ya estaba.
    
    Cogí su verga y la fui acercando a la entrada de mi culo, la froté en él y noté la receptividad de mi ano que se abría por si solo para acogerlo queriendo tragarlo, tiré mi cuerpo hacia abajo y entró su glande.
    
    -Te va a doler un poco, prepárate. –y sin más dio un fuerte golpe de cadera y me lo metió todo de golpe, solté un gemido de dolor, tenía razón y dolía la metida tan brutal, pero le animé cuando pude hablar.
    
    -No te preocupes por mí, disfruta tú. –se inclinó para morder mis labios.
    
    -Eres increíble putito, te gusta hasta el dolor que te causo. –realmente me había puesto nervioso y el dolor había sido producido más por la sorpresa, también sentía placer al notarle allí tan dentro de mí, no era tan perfecto como él imaginaba.
    
    -Dame ...
    ... fuerte, no te detengas. –se había quedado quieto disfrutando del momento de su posesión y de verme rendido bajo él, clavado en la cama por su verga que me atravesaba.
    
    Me besaba y se levantaba para mirarme y volvía a besarme de nuevo, me decía que me amaba más que a nadie y yo extraviado pasaba mis manos por sus costados y acariciaba sus nalgas metiendo mis dedos hasta la entrada de su ano.
    
    -Te sigue doliendo mi amor. –a veces tan bruto y otras tan delicado, en un contraste que me excitaba hasta la locura.
    
    -Te he dicho que me des, quiero que me destroces y me goces, estoy muy bien con mi macho dentro de mí.
    
    Comenzó a moverse lentamente entrando y saliendo sin dejar de mirarme lujurioso.
    
    -Te voy a hacer mi mujer, mi hembra. –gemí de placer por el roce de su polla en mi ano y porque pensara en mi como que era su mujer y su hembra.
    
    -Sí, sí, soy toda tuya, fóllame y lléname con tu leche. –su enorme pedazo de carme abrasaba mi culo entrando y saliendo sin parar, comencé a sentir un enorme placer que me obligaba a agarrotar mi cuerpo y comencé a temblar en un orgasmo anal que me hacía perder el control de mi cuerpo.
    
    Cuando me calmé abracé su cintura con mis piernas abriendo para él toda la entrada de mi culo, cerrada por el orgasmo momentáneamente y ahora vuelto a abrir para que siguiera follándome. Estaba disfrutando como un poseso.
    
    -Eres estupendo Gonzalo, me llevas a mundos desconocidos, te amo mi amor, eres mi hombre adorado, gracias. –entraba deliciosamente y ...
«12...6789»