Mis odiosas hijastras (11)
Fecha: 10/03/2024,
Categorías:
Hetero
Autor: dickson33, Fuente: RelatosEróticos
... lo invitó a cenar. Parecía simpático, aunque se le notaba la cara de vampiro —agachó la cabeza, como si al evitar el contacto visual con nosotros le resultara más fácil seguir con la historia—. Yo sabía de la costumbre de mamá de mandar a las chicas a que provocaran a sus novios, para ver cómo reaccionaban. Pero hasta el momento a mí no me había mandado, porque era muy chica —siguió diciendo, mirándose la punta de los pies—. Pero ese día las chicas estaban de vacaciones en la costa, y yo me había quedado con mami porque ella me lo pidió. Ahora me doy cuenta de que lo hizo a propósito, para hacerme “debutar”. Pero en ese momento no lo sabía. Terminamos de cenar y me fui a mi cuarto, para dejarlos solos. Pero enseguida mami me mandó un mensaje diciéndome que por favor estuviera atenta a próximos mensajes que me podría mandar en la madrugada. Me dijo que no me preocupara, que simplemente era cuestión de ver si el tipo miraba más de lo que tenía que mirar, o si se iba de boca. Así que esperé, y a eso de la una de la mañana me mandó un mensaje. Me dijo que Omar estaba abajo, fumando. Ella le había dicho que odiaba que fumen en su cuarto, así que lo mandó al patio de afuera a hacerlo. Después me dijo que fuera ya mismo abajo, a la cocina, fingiendo que me dieron ganas de tomar un vaso de leche. Pero que fuera solo con ropa interior. Que en todo caso le dijera que me había olvidado que él se había quedado en casa. Así que le hice caso. Tenía un conjunto de bombacha y corpiño ...
... blancos. Bastante común y corriente, pero la cuestión es que estaba en ropa interior. Fui hasta la cocina, y cuando él escuchó ruido dejó de fumar y se metió a dentro. Me comió con la mirada. Después disimuló, pero ya me había visto de pies a cabeza, y no había podido ocultar que le había gustado. Le dije lo que le tenía que decir, que me disculpara, que me había olvidado que él estaba en la casa, que como ahí vivíamos todas mujeres, yo tenía esa costumbre. Y él me dijo que no importaba, que no era la primera vez que veía a una chica en ropa interior. Que en la playa todas usan bikini así que por qué se iba a escandalizar por verme en ropa interior. Yo le sonreí. Creo que habré hecho una sonrisa tonta, pero lo importante era que creyera que lo estaba provocando. Aunque ya le iba a decir a mami que me miró con lujuria, igual quería estar segura, porque me daba pena acusar a un hombre inocente. Estaba nerviosa. Abrí la heladera y me agaché. Y entonces él me tocó. Lo raro es que no tardó ni un segundo en hacerlo. Y entonces yo me separé de él. Y pensé, ya está, mami lo va a echar a patadas. Pero cuando me quise ir, él me agarró del brazo y me puso contra la heladera. Me dijo que era una pendejita puta, que no tenía que andar mostrándome así frente a las parejas de mi mamá. Me dijo que ahora iba a ver lo que hacía con las pendejitas como yo. Me corrió la bombacha a un costado y me metió el dedo. Yo me quedé congelada, sin poder decir nada, y él seguía escarbando. No sé por qué no grité. ...