1. Dominado en el colectivo (2)


    Fecha: 18/06/2024, Categorías: Dominación / BDSM Autor: El otro yo, Fuente: CuentoRelatos

    ... dirección. La tomó con suavidad, besó la parte superior y después se dedicó a lamer mis dedos. Prosiguió besando de mi muñeca hasta mi codo para rehacer el camino lamiendo mi brazo. Repitió el proceso siguiendo con sus besos hasta mi hombro y luego sin dudarlo ni mostrar nada de asco lamió mi axila, provocándome una larga risita. Siguió descendiendo por el costado de mi cuerpo hasta llegar a mis muslos. Hizo lo mismo con mi otro brazo y al concluir se dedicó a mi vagina.
    
    Le permití saborearme hasta que sentí mi orgasmo acercarse. Aún faltaba su premio mayor y si acababa no podría dárselo. Le ordené acostarse boca arriba y saqué un preservativo de abajo de la almohada. Se lo coloqué sin dejar de mirarlo. Acomodé la entrada de mi conchita a milímetros de su punta.
    
    - En ocasiones especiales – dije sin dejarme caer – voy a permitirte meter tu pene dentro de mi.
    
    - Gracias mi diosa – dijo agitado.
    
    - Deberás ganártelo cada vez y para que se repita debes hacerte una vasectomía. No pienso volver a coger con vos con preservativo, ¿estás de acuerdo?
    
    - Si mi diosa – a pesar de sus ganas de penetrarme esperaba quieto que yo lo hiciera.
    
    - Rogame – dije acercando nuestros sexos aún más y comenzando a moverme cuidándome de no tocarlo.
    
    - Por favor mi diosa
    
    - ¿Por favor qué?
    
    - Por favor permita que mi pene también se entregue a usted.
    
    - Tu pene – dije agarrándolo – ya me pertenece. Intentá otra cosa y ni se te ocurra correrte hasta que te lo ordene.
    
    - Ufff. ...
    ... Permítame que todo mi cuerpo la adore y le de placer.
    
    - Mejor – dije bajando sobre él.
    
    - Ahhh – me quedé quieta esperando que continuara convenciéndome
    
    - Decime que te gusta de mi – sus ojos iban de los míos a mi ombligo.
    
    - Me atrae todo de usted.
    
    - ¿Todo?
    
    - Si, es perfecta – empecé a moverme despacio
    
    - ¿No te gustaría que mis tetas fueran más grandes?
    
    - No mi diosa – Aumenté mi velocidad – me encanta todo su cuerpo
    
    - ¿Y de mi personalidad? – acerqué un dedo a sus labios
    
    - Me fascina ser suyo – me tomó con suavidad de mi muñeca y lamió mi dedo – estar a sus pies. Me excita saber que la doblo en edad y que es apenas poco más que una nena – gemí al oírlo – que tiene bombachas de flores – sus palabras estaban calentándome más que lo que estábamos haciendo – y que con una sonrisa y un movimiento de su ceja – apoyé mis dos manos en su pecho – me hizo su esclavo
    
    - Ahh – empecé a moverme a toda velocidad y a los pocos segundos me estaba corriendo. Antes de que se terminara mi clímax le dije que podía acabar. Sentir su corrida a través del condón alargó algo mi placer.
    
    Nos quedamos mirándonos abrazados unos minutos. Después le dije que a partir de ese momento viviría en mi casa. Le obligue a que me dijera en serio que era lo que más le gustaba de mi cuerpo y me confesó que eran mis ojos, mi ombligo y mis piernas.
    
    Aprendió rápido a bañarme, depilarme, teñirme y pintarme las uñas. Nunca dejó de adorarme. No por buscar que lo premiara (que algunas ...