1. Así fue como comencé


    Fecha: 05/10/2024, Categorías: Primera Vez Autor: ElenaRmz, Fuente: CuentoRelatos

    ... quedaba y grite con la poca fuerza que me quedaba.
    
    Yo: "¡no, dentro no, por favor, nooo!"
    
    Entonces sentí el vacío, la ausencia de la carne que tanto placer me estaba dando, y luego salpicaduras, gotas húmedas y pegajosas, rítmicamente caían en mi sudada baja espalda.
    
    Macario: "Oh, que ricooo, Diosss",
    
    Mientras sentía las últimas gotas sobre mi sudorosa piel
    
    Macario: "eso fue increíble".
    
    Estaba congelada, incapaz de moverme, superada por la pasión de los últimos minutos y la culeada que acababa de experimentar.
    
    Macario: " ¿estás bien?"
    
    Yo: "Sí, sí, estoy bien", mientras me recostaba nuevamente sobre la cama.
    
    Macario: "¿Quieres darte una ducha? Parece que lo necesitas",
    
    Mientras sentía cómo sus mecos comenzaban a deslizarse por mi espalda.
    
    Yo: "Sí, eso sería bueno",
    
    Mientras bajaba temblorosa y agitada de la cama y recogía mi ropa del suelo.
    
    Me mostro dónde estaba el baño y abrió la ducha para mí. Hizo ademán de irse cuando entre en el cubículo, pero se detuvo en la puerta, para verme enjabonándome, con la espuma blanca sobre mi cuerpo.
    
    Macario: "Esas tetas son simplemente perfectas",
    
    Camino de la puerta del baño y entro en la ducha, asustándome cuando se posiciono detrás de mí para tomar mis tetas en sus ásperas manos, y las apretó.
    
    Yo: "Macario, ¿qué estás haciendo?, sal de aquí".
    
    Acaricio mis pechos pasando sus dedos por mi suave pero firme carne, antes de atrapar sus pezones hinchados, causando estragos en mi centro de ...
    ... placer, ahora empezaba estar tan mojada por dentro como por fuera.
    
    Yo: "Mmmm, Macario, nooo por favor... mmmm, Macario, no... por favor... por favor..."
    
    Queriendo controlar una situación, donde no mandaba la razón, gobernaban mis entrañas, mientras sus caderas comenzaban a moverse, buscando el placer en las caderas de Macario.
    
    Bajo su mano entre mis piernas y froto sus dedos a través de mi monte de venus, liberando electricidad erótica por todo mi ser, Mis piernas se abrieron de inmediato para darle un mejor acceso a su cuquita.
    
    Yo: "Uuunngg",
    
    respingué cuando su dedo entro y luego un segundo, lo que me hizo gimotear en voz alta. Y mientras me penetraba con los dedos, la otra mano se movió hacia arriba para acariciar sus senos.
    
    Eché la cabeza hacia atrás, perdía el aliento, me sostuve con una mano de su nuca porque mis piernas no me sostenían, necesitaba sentir sus labios, su lengua en vacía boca, giré la cara y lo besé apasionadamente. Gimoteaba en su boca mientras mi otra mano se apoyaba en su mano que cubría mi entrepierna mientras continuaba empujando sus dedos dentro y fuera de espasmódica vagina.
    
    Inconscientemente levanté mi pierna y arqué mi espalda, para sentir su verga completamente erecta y palpitante deslizarse por los labios externos de mi cuca y entonces sucedió nuevamente, con un solo empujón, me penetro. Mi vagina abrazaba dulcemente su verga mientras bombeaba su pelvis contra mis nalgas rítmicamente.
    
    Su mano alcanzó mi clítoris, y mi cuerpo ...