1. Mis adoradas mujeres


    Fecha: 12/10/2024, Categorías: Grandes Relatos, Autor: WadeHolden, Fuente: CuentoRelatos

    ... estrecho con Rosi, que se hallaba realmente interesada en él… y él en ella. Miriam le dejó su automóvil, el que se llevó cuando se fue, en agradecimiento. Yo no puse objeciones a nada de lo que ella decidiera. Estaba en pleno derecho. Debido a eso, le asigné el Mazda Miata de color rojo, que había comprado poco antes de su partida para levantarle el ánimo y que tanto le llamaba la atención. Un buen cofrecito para esa magnífica joya.
    
    El tema Camila resultó más sencillo de lo que temí. Simplemente, un sábado en que estábamos reunidos los cuatro confabulados en la piscina, desnudos y bebiendo en plena bacanal, creyendo que ella y su marinovio estaban de viaje, se presentaron de improvisto y nos encontraron con las manos en la masa. Se quedaron estupefactos, si se puede utilizar una palabra tan rimbombante. Ya ellos habían visto a Miriam y conocían la historia de su logro y sabían lo de Rosi conmigo, desde antes de reaparecer Miriam, pero ignoraban nuestra confabulación. Como no querían quedarse al margen de nada se desnudaron y se metieron en la piscina, con nosotros y se prendió el peo. Esa tarde cada uno de nosotros folló con cada uno de los integrantes del sexo opuesto presentes. Por fin Camila se pudo acostar conmigo. Bueno, eso fue un eufemismo, lo hicimos dentro de la piscina, parados y luego fuera de ella, en una hamaca, yo sentado a horcajadas y ella ...
    ... cabalgándome. Y el zángano de Juan Luis esa tarde se raspó a Miriam y a su adorada suegra, en fila india. Miriam tuvo que regañarlo porque era demasiado fogoso, una fuerza bruta desencadenada. Tuvo que calmarlo primero y enseñarle a tratar con damas maduras. Rosi, por su lado, fue embestida por el tipo, pero ya más tranquilizado por Miriam y le arrancó unos cuantos inusuales gritos. Según las chicas, el arma del joven amante era poderosa, grande y gruesa, casi como la mía, pero yo era más sutil y gentil con mi gran aparato y Orlando, bueno, sin tener un gran cañón, era todo un gentil amante, lleno de habilidades seductoras, ratificado por Andrea.
    
    Todo resultó muy heterosexual, nada homo. Y fuimos muy felices, tanto que ese tipo de reuniones se realizaron con mucha frecuencia a partir de ese momento, en nuestra piscina. Un secreto entre seis que hasta el día de hoy se ha mantenido.
    
    Al poco tiempo Camila y Juan Luis se casaron y tuvieron una princesita linda como su madre, su abuela y su bisabuela; la llamaron Sol, en memoria de la bisabuela Soledad; Miriam y yo seguimos juntos y felices y Rosi por su lado y Orlando por el suyo, pero se veían con mucha frecuencia entre ellos y ambos siempre muy cerca de nosotros. Nunca le había conocido un amante a mi hermana que pasara del segundo round. Y nos reuníamos todos de vez en cuando, en privado siempre, en nuestra burbuja.
    
    FIN 
«12...35363738»