Nueva normalidad
Fecha: 23/07/2025,
Categorías:
Incesto
Autor: Mamaceando, Fuente: CuentoRelatos
... Era su secreto y la cara de Lucia el lienzo en el que pintaba sus pasiones dos veces por semana.
Al principio un poco con asco, ella aguantaba la respiración y cerraba los ojos mientras Alberto descargaba sus chorros sobre su cara, pero ahora disfrutaba verlo apuntar y gesticular cada que se descargaba sobre ella, lamer los restos para volverlo totalmente loco, además de que le sumaba puntos. Su iPhone, la nueva laptop y la renovación de su guardarropa eran testigos de ello. Al igual que sus medios hermanos que llevaban días siguiendo sus movimientos sin saber que hacer para poder entrar al juego.
—Era ella—le decía Betito a su hermano.
—Maldito viejo, por lo menos debería combidarnos de su esposa.
—Las quiere solo para el
—Es un maldito
—¿Quien es un maldito? —pregunto Diana saliendo de la cocina.
—Nada, un videojuego de guerra que traemos en línea.
—Pero vamos a buscar las armas necesarias para vencerlo y ganaremos. Cobraremos el tesoro que nos pertenece dijo Chava riendo con su hermano.
La respuesta estaba ahí frente a ellos. Tenían que hacer que Diana se enterará, pero sin que ellos quedarán enmedio o su padre los mandaría a la calle. Así que después de estar seguros que días y a qué horario se veían su padre y su hermanastra, buscaron la manera. Desde un teléfono de prepago le mandaron varios mensajes de texto, dándole ubicación y todos los detalles para que ella por sus medios llegara a su escondite de amor.
Al principio pensó que era una ...
... broma, alguna vez la estafaron con un premio que jamás cobro, así que con la reserva de no caer de nuevo pidió permiso para retirarse temprano ese jueves, tomo un taxi luego de cambiarse de ropa en una gasolinera espero paciente tras un puesto de revistas. Pensó en irse pero vio el auto de Alberto acercarse y entrar al estacionamiento. Los labios se le secaron y las piernas le temblaban. ¿Cómo me puede hacer esto? Se preguntaba con rabia. Si entraba de inmediato el buscaría algún pretexto así que espero por unos minutos si perder de vista la habitación a la entraron a aquel auto hotel. Incluso pensó en qué no valía la pena, volvería a casa, tomaría a su hija y se irían. Ya se las han arreglado antes y lo volvería a hacer. En contra esquina los hermanos se miraban ansioso miéntras devoraban unos tacos y dentro de la habitación la verga de Alberto buscaba taladrar el culo de Lucia que enfundada en un conjunto de enfermera apretaba la mandíbula mientras entraba aquella verga por detrás.
Desde unos días atrás Alberto y Lucia jugaban el rol de Papá e hija así que ella a gritos le pedía más placer, sin importar quién los escuchará a través de las paredes.
—eso papi, rompeme el culo papito, ¿Te gusta mi colita?
—me encanta darte por tu colita mi nenita.
—¿Me vas a dar mi lechita? —Lucia sabía que en cuanto aceleraba el ritmo era cuestión de minutos para que terminara y se hizo aficionada a que su cara recibiera el semen.
—¿Los quieres en la cara putita?
—Si papito ...