Mamá follando desnuda en la playa - Relatos Eróticos

Mamá follando desnuda en la playa

... progenitora.

Tanto gozábamos que no nos dimos cuenta de que estábamos ya en el pueblo donde pasábamos el verano.

Alcanzamos el orgasmo segundos antes de que el deportivo se detuviera delante del portal de nuestra vivienda.

Se abrió automáticamente la portezuela del deportivo y de un empujón nos echó fuera “el cabrón, el hijo de puta de “el polla gorda”. Caímos al asfalto y nos tiró encima la bolsa donde teníamos nuestra ropa.

Le escuché decir en voz alta, dirigiéndose a mi madre:

·¡Te llamaré Rosi!

Y, arrancando el vehículo, nos dejó ahí, tirados completamente desnudos en mitad de la vía pública con un montón de gente mirándonos curiosos.

Me di cuenta horrorizado de que todavía tenía mi cipote dentro del culo de mi madre y lo que era peor, ¡allí estaba también mi padre mirándonos con un rostro desfigurado de loco furioso!

La bronca que nos cayó fue apoteósica y, si mi padre no nos agredió, no nos asesinó, fue porque en el fondo nos consideraba también una víctima de su primo Roberto. Fuimos el resto del verano el hazmerreír del pueblo y, si no nos denunciaron por escándalo público, fue más bien por sadismo, para reírse más de nosotros y que les debiéramos un favor. Seguramente mi madre también pagó el favor con creces con más de un parroquiano.

No sé porque actuó así Roberto “el polla gorda”. Quizá fue por odio hacia su primo, mi padre. Quizá fue por envidia, que mi madre morreara apasionadamente conmigo, que ella dejara tan fácilmente que su hijo se la follara. Lo que era evidente es que no actuaba ni mucho menos como una persona normal, quizá por las drogas pero estaba loco como un cencerro.

Como conocía a algún otro exnovio de mi madre, todos precisamente no muy normales, quizá es que la gustaran los locos, los locos salidos y folladores.