Verónica, una lectora que se convierte en uno de mis relatos - Parte 3
Fecha: 05/09/2017,
Categorías:
Hetero
Autor: Tonyzena67, Fuente: CuentoRelatos
... frente a ella. Quita el botón y baja el cierre, y mis pantalones caen dejándome solamente con mi bóxer, el cual ya tiene esa mancha de mis fluidos seminales. Verónica me los baja con una mirada de excitación, quiere volver a ver esa verga que le abrió la panocha y el culo por primera vez en su vida. Me habla que le gusta el olor, el olor de mis fluidos seminales, los cuales con sus dedos esparce por todo mi glande para luego llevárselo a la boca. Aquella imagen es exquisita y permito que me la mame por algunos minutos, simplemente para que ella se dé gusto, pues en mi mente está la idea de simplemente darle a esta hermosa niña, todo el placer que pueda darle.
La invito a que por primera vez me cabalgue. La dirijo y ella va sobre mi y creo que a ella le gusta tanto esa posición, pues al frente tiene ese espaldar de la cama, que en realidad es un enorme espejo y puede ver esa imagen que creo idealizará por un buen tiempo, pues puede ver a la vez la verga que se hundirá en su pequeño orifico. Toma posición con una parsimonia, pues intuyo quiere guardar esa imagen en ese cerebro inquieto y juvenil y me ha tomado la verga que desesperada se mantiene bien erecta y se la pone a la entrada de ese pequeño paraíso. Se soba delicadamente con mi glande su panochita y ve con enorme excitación como centímetro a centímetro mi verga desaparece y la tiene ahora acariciando sus entrañas.
Aquella imagen tuvo que ser tan emocionante para Verónica que no solamente la quería llevar en su ...
... memoria, quería tener el eco de esta recreándolo con su vista y me pregunta:
—¿Puedo tomar video de esto?
—¿Qué pasa si alguien te encuentra esto?
—Yo se que hacer para que eso no suceda
Me da una explicación que para ella es segura, pero acuerdo a que seré yo quien lo tome desde miángulo, pues yo no quiero mostrar mi rostro en video alguno, y que si ella se quiere exponer a esto, pues ya es su responsabilidad. Ella está de acuerdo y se baja para ir por su celular inteligente, el cual está a solo unos cinco pasos de la cama.
Por primera vez en mi vida estaré en un video y fotografía teniendo sexo, aunque obvio, mi rostro no será parte del paisaje, pues realmente me gusta mucho mi privacidad. Verónica me da su celular, me dice que es lo que debo hacer y es obvio que a ella no le importa que el lente apunte a su lindo rostro y su riquísimo cuerpo totalmente desnudo. Por instrucciones de Verónica aprendo a usar esa función de acercamiento y alejamiento de la cámara incorporada a su teléfono y a punto a esa pequeña panocha que mágicamente hace desaparecer mi verga en su pequeño orificio nuevamente.
Yo capto la escena lo mejor que puedo y la luz incorporada en el aparato ayudan a tener una buena imagen a la acción. Por alguna razón encuentro que para Verónica aquello de grabarse es tan excitante, que gime profusamente y vuelve ese implorar de Dios, que creo que ni cuándo va a la iglesia lo implora tanto:¡Oh Dios mío, que rico! Oh Dios que rica verga!¡Por Dios dame ...