1. Tatiana Cap II: Juegos Lujuriosos


    Fecha: 16/09/2017, Categorías: Sexo con Maduras Autor: dantestr, Fuente: RelatosEróticos

    ... después del tratamiento del día anterior. La muy putita lo disfrutaba, estaba segura, y decidió aprovecharlo. Amasó con sus dos manos la teta que chupaba, apretándola para extraer el sabroso elixir que tragaba con gusto. Después de un momento se apartó para cambiar de pecho. La imagen de la ubre que había estado succionando, toda llena de saliva y con el rozado pezón erecto y aún con gotitas de leche manando de él, le resultó maravillosa.
    
    ―¡Ay!, señora Marta.―El rostro de Tatiana evidenciaba un placentero estremecimiento; respirando entrecortadamente y algo sonrojada, irradiaba culpabilidad―. La verdad es que no me duelen, no es necesario que lo haga.
    
    ―Tranquila muchacha. Es preventivo, precisamente para que no te duelan―la tranquilizó―Ahora seguiremos con la otra, ¿está bien?
    
    ―¡Ay sí!, señora Marta. Siga con la otra por favor.
    
    Sin piedad se abalanzó sobre el precioso melón que Tatiana le ofreció. Incluso la joven lo había levantado con su propia mano, entregándole el pleno derecho de gozarlo. ¿Qué estaría pensando la pobre incauta en ese momento? se preguntó Marta. Era obvio que lo disfrutaba, asumiendo el placer que Benito y ella misma le habían insistido que no tenía que reprimir. Seguramente la muy insensata seguía pensando que se estaba beneficiando de la desinteresada ayuda de sus vecinos. Esa certeza hacia volar la imaginación de Marta en cuanto a las posibilidades que se le habrían, aprovechando con calculadas patrañas el agradecimiento que la joven ...
    ... sentía hacia sus benefactores.
    
    ―¡Ay!...mmm―seguía escuchando―¡Ay!
    
    Pero no era el momento de planificar, ni de inventar engaños, era el momento de aprovechar. Succionó el productivo pezón con energía, relamiéndolo con su lengua, apretándolo con sus labios, ayudando con un agresivo magreo a la teta a expeler todo su sagrado contenido.
    
    Pero el pequeño Benjamín rompió el hechizo. Empezó a llorar desesperado porque su chupete se le había caído entre unos juguetes ahí donde no lo podía alcanzar. Marta se apartó, dejando que la joven madre atendiera a su bebé. Notó que Tatiana estaba incomoda y avergonzada; y, si bien no se veía para nada molesta, supo que no era el momento de seguir presionándola, sino de tantear las oportunidades que los sentimientos de amistad y gratitud de Tati le pudieran ofrecer. Así que ella misma le alcanzó el peto a su amiga para que se lo pusiera.
    
    ―Benito me estuvo instruyendo ayer sobre lo que aprendió en aquel curso―dijo alegremente Marta―. Por lo que te puedo decir que tus pechos están reaccionando muy bien al tratamiento. No hay durezas ni dolor y producen muy bien; así que Benjita podrá seguir alimentándose de ellos sin problemas―aseguró mientras acariciaba al pequeño que había vuelto a jugar feliz habiendo recuperado ya su chupete.
    
    ―Pero, señora Marta, que pena me da con usted―replicó afligida Tatiana―. Digo, no debe ser grato para usted practicarle un contacto tan íntimo a otra mujer…
    
    Ese tipo de puertas eran las que no podía dejar que ...
«12...8910...15»