La historia de Ángel, solo era un muchacho (20)
Fecha: 01/05/2020,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos
... colocó sobre él, sentado en su abdomen. Nos abrazamos y volvimos a besarnos la cara y los labios.
-¿Quieres metérmela tu? -me susurraba las palabras en la oreja y me separé sorprendido.
-¿Qué dices? -se reía y me abrazaba no dejándome que me separara de él.
-Deseas meterla en mi culito, tu polla, ésta. -metió la mano entre nuestros cuerpos y agarró mi verga.
-Yo pensaba que tu, que tu… -seguía riendo en mi oido y me lo besaba.
-No me conoces gatito, ya te decía entonces que yo también deseaba tu verga, es preciosa, más bonita que como la que veía en las fotos, ¿puedes hacerlo mi amor? ¿quieres cogerme? -quería hacérselo, follármelo en aquel momento, tener ya mi polla dentro de él.
-Sí que quiero Álvaro. -parecía que sabía mi respuesta y me bajó de encima de él colocándose de rodillas sacando el culo, ya sabía cual era mi labor y le abría las nalgas, su culito era precioso, sonrosado y con un círculo más moreno con pelitos alrededor del ano.
Le separé las nalgas duras y con un ligero vello, metí mi cara buscando con la lengua su agujero, el olor era increíble, olía como el cuerpo de un bebe y aplique la lengua queriendo penetrarle.
-¡Ohh! ¡Ohh! ¡Ohh!, más lento mi amor, tu lengua está muy rica pero no quiero correrme aún. -le lamí el perineo y toda la raja del culo, tenía algún poco vello que le hacía parecer un machito perfecto, pero el sabor de su culo me había encantado y pronto volvía a el, a lamerlo y querer penetrarlo.
-Méteme los dedos ...
... gatito, dilátame porque quiero que tu verga me rompa. -le empecé a lamer más intensamente y me mojé el dedo índice, a la vez que lamía se lo iba introduciendo.
-¡Ayy! si mi amor, lo haces muy bien, me das un gustito muy rico mi vida. -después le fueron dos dedos que entraron con facilidad, su ano era muy dúctil y me dejaba entrar sin resistencia excesiva.
-Espera que me cambie, déjame hacer a mi vidita. -me tumbó mirando hacía arriba y se inclino para volver a chuparme la polla, poniéndomela dura com una roca y mojándola de saliva.
Se sentó sobre mi vientre y apretó las piernas a mis costados, adiviné lo que deseaba hacer, se tumbó apoyándose en mi pecho y me miró a los ojos.
-Es la primera vez que lo hago, tu verga va a ser la que me desvirgue mi amor. -me besó con amor infinito los labios y se enderezó para cogerme la polla, se levantó sobre sus rodillas para embocarla en su culo, lo sentía muy caliente haciendo presión mientras se sentaba mordiéndose el labio inferior.
-Te vas a hacer daño. -pareció no escucharme y le miraba preocupado esperando ver su reacción, aflojó la presión de las manos sobre mi pecho y le escuché el gemido que dio cuando el esfínter se abrió para que mi verga entrara.
Le veía cerrando los ojos con fuerza y apretando entre sus dientes el labio, yo quería que gozara, no que estuviera sufriendo, pero Álvaro era un tipo valiente cuando tomaba una decisión y lentamente se dejaba resbalar por mi polla hasta metérsela toda.
Estuvo unos ...